
Además, ayer se observó otra señal potencialmente muy positiva, ya que más del 55% de los componentes del S&P 500 alcanzaron un máximo de 20 días. Conocido cariñosamente como el Indicador de Empuje deGraff, descubierto por Jeff deGraff en RenMac, este inusual impulso es una señal de fortaleza extrema, ya que muchas acciones alcanzan un nuevo máximo mensual simultáneamente. Este es otro más en la creciente lista de posibles desarrollos alcistas que sugieren que lo peor ya pasó y que es probable que lleguen tiempos mejores en 2025.
Considerando las últimas 30 señales, un buen rendimiento al final del año es perfectamente normal. Increíblemente, el S&P 500 ha estado al alza un año después en 29 de 30 ocasiones, otra pista de que los alcistas podrían divertirse en el futuro.