
Si no estamos tratando de sacar provecho de su comportamiento irracional –en particular en los mercados públicos–, entonces ¿qué estamos haciendo aquí?
Cuando nuestros niveles de estrés son elevados, nuestras emociones se desencadenan.
Y nos comportamos irracionalmente.
Lo podemos ver, si lo intentamos, todos los días en el mercado de valores.
Y cuando se añade la política a la ecuación, la locura aumenta exponencialmente.
Expectativas sesgadas
Mi amigo Ryan Detrick estuvo hablando sobre este gráfico de expectativas de inflación a un año por afiliación partidaria durante el fin de semana:
Los demócratas esperan una inflación del 9,6 % en un año. Los republicanos hicieron lo mismo en 2022.
Ryan, quien es el estratega jefe de mercado de Carson Group, está tratando de comprender cuán loco es este comportamiento.
Pero esto es lo que esperábamos.
Los humanos están locos.
Y gracias a ello se puede ganar dinero.
Energía baja
Un repunte del dólar estadounidense aquí podría desencadenar una serie de eventos que muevan el mercado.
Ayer mencionamos que el área de 100 para el índice del dólar estadounidense (DXY) es la más importante.
Si el DXY está por encima de 100, el riesgo es alcista.
Desde una perspectiva sentimental, esa posición corta masiva por parte de los especuladores en el mercado de futuros, de cara a 2025, se ha deshecho por completo.
Esa fue una de las razones principales por las que compramos oro y acciones internacionales en el primer trimestre.
Eso ya se acabó. Volvemos a un posicionamiento más equilibrado entre especuladores y operadores de cobertura en el mercado de futuros.
Así que pensemos en las implicaciones de un repunte del dólar.
A continuación se muestra un gráfico de los precios del petróleo crudo de los últimos dos años superpuesto al índice del dólar estadounidense:
Lo dejé sin etiquetar a propósito para que puedas ver que ni siquiera podrías distinguir cuál es cuál sin que yo te muestre las etiquetas y el eje Y.
Así es como se ve:
Si nos alejamos, podemos ver realmente cómo las acciones del sector energético no han logrado ningún progreso desde la Gran Crisis Financiera.
Es el único sector, de los 11, que todavía está por debajo de sus máximos de la crisis financiera mundial.
Es un poco loco cuando lo piensas.
Los sectores financiero y de construcción de viviendas, los culpables de aquel mercado bajista de 2008-2009, se han recuperado y han superado con creces esos máximos.
Hay que tener en cuenta que la energía representa sólo el 3% del índice S&P 500, un porcentaje aún menor del Promedio Industrial Dow Jones (2%) y sólo el 0,5% del Nasdaq 100.
Los estadounidenses simplemente no tienen ninguna exposición a este grupo.
Así como nadie quiere dólares, nadie quiere energía.
Y están bailando juntos.
Ya teníamos una acción energética en la cartera. La semana pasada añadimos una segunda.
Y es probable que agreguemos un tercero en los próximos días.
Mantente alerta,
JC Parets, CMT
Fundador, TrendLabs