Es frustrante porque en tantos años operando en los mercados nos ha pasado de todo y ver como todo sube y algún activo que tengas en cartera haga lo contrario es un como un doble daño o es como extremar el efecto tóxico de estar perdiendo, una cosa es que una operación haya salido mal o vaya muy mal y otra es que además si hubiésemos hecho otra habría salido bien o muy bien.
En el IBEX hay dos que están en un mal momento con el índice en máximos históricos, Cellnex que no levanta cabeza y vuelve a tantear el soporte crítico de los 28.50 que si lo raja a la baja podría haber hecho o confirmado una pauta de continuación en bandera bajista y que se vaya a por el objetivo de la figura de cabeza hombros realizada en la cima de la serie entre 2020 y 2022, vamos que se vaya a 15 euros si el mercado por cualquier razón nos da un susto.
Luego está Puig Brands que nada, ha perdido mínimos anuales anteriores y le está costando recuperarlos incluso, confirmando que su salida a bolsa por el precio que lo hizo fue literalmente una tomadura de pelo a los inversores. De máximos a mínimos en prácticamente año y medio un 50% a la baja, implicando una colocación de su papel a un precio ciertamente abusivo por parte de la empresa.
Os recordamos que : Puig salió a bolsa a un precio de 24,5 euros por acción, que era el valor máximo de la horquilla y el precio fijado debido a la alta demanda de los inversores, según fuentes como Expansión y El Economista. Aunque la salida fue a un precio considerado alto por la empresa al final del rango, se justificó por la gran demanda de los inversores institucionales.