Con total sinceridad y casi con no mayor criterio que el sentido común a nuestra Matilde la vemos muy lateral en el futuro, ahora mismo ni siquiera le están descontando positivamente su intención de crear infraestructura de fibra óptica para España, ya está haciendo pruebas y por lo visto piensa «pegar duro» en esta dirección donde ONO es actualmente ama y señora en este país.
Desde luego la guerra comercial entre plataformas le está pasando factura, fuera de España no vende lo que vendía y dentro con las bajas de telefonía fija y los cambios de usuarios a plataformas menores no nos hacen ver o creer en máximos por encima de 15 euros.
Si le sumamos que ya su política de dividendos al accionista está pasando a la historia pues eso, que su precio vuelva a cotizar sobre la directriz alcista rota que trae desde su suelo en 2002 no parece probable y si ello es así, pues va a quedar presa entre 10 y 15 euros.
Por el momento en el corto plazo ha tocado todos los apoyos técnicos del precio, no ha reaccionado positivamente ni al buen comportamiento del sector tecnológico en general y el teleco en particular, es más ni siquiera está mejor que el mercado (tampoco peor) pero claro un pullback a la directriz alcista sería el comportamiento técnico más coherente.
No obstante habiendo tocado mínimos del 2009 su ecuación rentabilidad riesgo mejora, si se cree en un mercado alcista tras los últimos mínimos tocados pues Telefónica sería compra con STOP en el último mínimo (10.7) el primero para los de corto plazo y otro STOP para los que vayan a medio plazo en 9.5 porque si pierde ese nivel desde luego lo pasará mal y que nadie diga que no es posible y si no que mire «las telefónicas europeas».