Los ataques políticos y sobre todo los insultos personales al presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, lanzados por el director del diario El Mundo, Pedro J. Ramírez, y la línea informativa y editorial de este periódico –presuntamente aliado de la derecha española que pretende derribar a Rajoy en plena crisis económica e institucional de España-, han agotado, según fuentes muy bien informadas, la paciencia de los dueños y editores italianos de El Mundo, RCS (Rizzoli Corriere de la Sera) MediaGroup, donde se integran como accionistas el gran poder empresarial y financiero de Italia –Mediobanca, Agnelli, etc– y ello le ha costado una dura advertencia al director del diario El Mundo, diario que está muy endeudado y pierde bastante dinero, que ha empezado a rectificar y a recular en su estrategia de acoso y derribo de Rajoy usando el caso Bárcenas como ariete para derribar la puerta de la Moncloa.
La gota que ha derramado el vaso de la paciencia italiana fue el artículo de Pedro J. de hace dos domingos donde llamó a Rajoy ‘El Padrino’ de una presuma mafia familiar de la corrupción del PP. Y ese insulto de ´la mafia’ –algo que conocen muy bien los poderosos editores italianos– ha sido utilizado ante los dueños de RCS contra El Mundo por mensajeros del Gobierno de Rajoy, y se suman a otras quejas anteriores que habían recibido de la Casa del Rey por el trato de El Mundo a la Corona (la Infanta Cristina sobre todo) y de algunos altos empresarios de las multinacionales españolas.
Por todo esto el director del diario El Mundo, Pedro J. Ramírez, ha comenzado a dar marcha atrás en su ataque frontal al PP y al presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, y en consecuencia el pasado domingo convirtió su artículo dominical (‘La Carta del Director’) en alegato, ‘excusatio non petita, accusatio manifesta’, sobre pretendidos apoyos de El Mundo al PP y su profesionalidad e independencia –al tiempo que presume de pedir siempre el voto para el PP– del periódico para justificar sus ataques políticos y personales a Rajoy, al que han pretendido derribar subido en el pacto Pedro J. con Luis Bárcenas. Pacto del que ahora dice el director del diario que no fue él a buscarlo sino que fue el tesorero quien pidió verle para confesarle todo. Lo que no es cierto, porque antes sus emisarios, Casimiro y Del Pozo llevaban semanas de conversaciones con Bárcenas y su esposa Rosalía, mimando a los dos en sus artículos. Además ¿quién paga ahora la minuta de los abogados Gómez de Liaño y de Márquez de Prado?
La Carta dominical de Pedro J. es todo un ejercicio disimulado pero palpable de marcha atrás, y la encuesta sobre el PP que abre su portada y en la que se afirma que la credibilidad de Rajoy está por los suelos, además de otro varapalo a Rajoy y al PP, es otra justificación. Como si con ella demostraran que la gran mayoría de los españoles está en línea con el diario, pero sin decir que han sido los últimos ataques de El Mundo los que han facilitado, en caliente, el resultado del sondeo. A la vez y sin citarlos, Pedro J. ha criticado en su artículo a los diarios El País, ABC y La Razón que lo acusan de ponerse al servicio de Bárcenas.
Pero sobre todo donde se produce el vuelco mayor de la línea del periódico es en su editorial donde el diario ya no pide la dimisión a Rajoy, como en días anteriores, sino que de explicaciones, pida perdón y haga ciertas reformas… Pero en qué quedamos: o Rajoy ha mentido, presidido la financiación ilegal del PP y cobrado sobresueldos en dinero negro, en cuyo caso no tiene mas salida que la dimisión como se la pide Rubalcaba, o no ha hecho nada malo por lo que no debe pedir perdón ni dar mas explicaciones.
Lo cierto es que Pedro J. viene agitando la caza de Rajoy desde hace ya varios meses. Primero por lo que califica como de una flagrante incompetencia política y modales no democráticos, luego lanzando una campaña contra el Gobierno por la subida de los impuestos y después subiéndose al carro político del regreso de Aznar, tras lo que sugirió la destitución de Rajoy en el seno del PP y el regreso de Aznar al frente del Gobierno y del PP.
Pero en las últimas semanas y tras su pacto con Bárcenas para lograr a la vez la exclusiva informativa de su confesión ante el diario y ante el juez y los originales de la doble culpabilidad que señalan con precisión la culpabilidad del PP en la financiación ilegal y en los sobresueldos en dinero opaco a dirigentes del partido, El Mundo y su director han pasado del ataque político a un ataque frontal en lo judicial y moral… Y es en ese momento y ante el desconcierto general de los votantes del PP y lectores de El Mundo –se dice que ahora leen El Mundo mas votantes del PSOE que del PP– cuando la presión política sobre los editores y dueños de El Mundo, el RCS MediaGroup, se ha hecho notar con el argumento del insulto de ‘El Padrino’ de por medio y la grave crisis económica e institucional de España, y a partir de ahí hemos empezado a asistir a la marcha atrás del diario frente a Rajoy.
Aunque algunos observadores consideran que Pedro J. podría estar ganando tiempo a la espera de conseguir mas papeles de Bárcenas o algún otro documento, porque está por dilucidar si las cuentas de Bárcenas de Suiza eran de exclusiva propiedad del ex tesorero o también eran del PP y en ellas se recibían los pagos de comisiones de grandes empresas españolas a cambio de favores del Gobierno, y desde ellas se pagaban a proveedores electorales del PP –como la trama Gürtel de Correa, los que también tenían cuentas en el extranjero-, e incluso a partidos políticos extranjeros y aliados del PP, de países como Venezuela, Ecuador, Bolivia, etc. Los reconocidos pagos a Severo Moto de Guinea abundan en idea. Y si eso fuera así que iban a decir en el PP: ¿qué Bárcenas era un filántropo de la derecha española que daba de su bolsillo subvenciones a partidos aliados del PP en el extranjero?
Este misterio de las abultadas cuentas de Bárcenas en Suiza, a las que Pedro J. se ha referido varias veces con insinuaciones, podría salir a la luz publica si el abogado de Bárcenas entiende que esta confesión no empeora la situación procesal de su defendido mas de lo que ya lo está. En todo caso el duelo Rajoy-Pedro J. está servido y falta ver como se desarrolla y quien es el vencedor final. De momento todo apunta a que El Mundo ofrece una tregua, pero si consigue más munición y alguna de ella ‘mortal’ para Rajoy el diario volverá a las andadas en pos de ganar el asalto final a esa fortaleza de La Moncloa, por cuyas dependencias deambula Rajoy, convencido que sus enemigos se van a cansar y a desinflar. El giro de posición que se atisba en el El Mundo le hacen pensar que su resistencia numantina le permitirá ganar.
