Lo peor de un sueño es despertar…

6500 millones de euros, esa es la cifra de lo que –al menos– ha costado a lo largo de estos años la inversión y gasto en la candidatura olímpica de Madrid. Un informe del Ayuntamiento madrileño   fechado en 2004 aseguraba que «la mayor parte de la inversión en infraestructuras está prevista con independencia de que la Ciudad de Madrid salga vencedora«, concentrando el gasto entre 2003-2008 y prolongándose luego hasta 2012.

Pese a que Gallardón y luego Ana Botella confiaran en las posibilidades Madrid como sede olímpica, no hay que olvidar que se han desembolsado unos gastos enormes, por no contar los que se habrán producido fuera de presupuesto y las de agasajar a miembros del COI a lo largo de varios intentos, desgraciadamente, fallidos.

Se ha intentado, hemos llegado muy lejos –varias veces ya, claro-, pero ¿quien paga la fiesta, ahora que las luces se han apagado?  ¿está la economía nacional para éstas lides?