El boom del fracking trajo consigo pues la proliferación de plataformas perforadoras desde el 2009 hasta el 2014 inclusive pero ahora con el colapso de los precios del petróleo desde el verano pasado y la saturación de inventarios, la gráfica en este bien de equipo queda bien clara e imaginamos que seguirá descendiendo, porque ya el problema no es sacar petróleo de la tierra sino donde almacenar tanto que ya se ha extraído.