El anteproyecto aprobado hace más de un año ha sido suavizado, pero no lo suficiente para que deje de calificarse el texto como ‘ley mordaza’ más propia de una república bananera que de un estado de derecho perteneciente a la Unión Europea, o sino juzguen Uds. mismos:
– Multa de 600 euros para organizadores de manifestaciones no aprobadas por la Delegación de Gobierno, o por salirse del recorrido si ésta hubiera sido autorizada.
– Multa de hasta 10400 euros para participantes que se nieguen a disolverse de la misma.
– Multa de hasta 30000 euros por desacato a la autoridad -interpretándose éste a discreción por los mismos policías-, para participantes en altercados, o. incluso por «fumarse un porro«.
– Por impedir pacíficamente un desahucio –por ejemplo, activistas que se interponen en el paso de un policía– de 600 a 10400 euros, que suben a 30000 euros si la policía alega violencia.
– Reuniones o manifestaciones prohibidas en las inmediaciones o infraestructuras de servicios básicos, así como la intrusión en éstas, incluyendo sobrevuelo, interferencias u obstrucción en su funcionamiento –por ejemplo y sin ir más lejos, una protesta de ecologistas frente a una central nuclear– hasta 600000 euros
Fuente: eldiario.es
Pues la verdad, yo no veo el problema, me parecen sanciones lógicas, euro arriba o abajo, y siempre considerando que se establecen márgenes, que sólo se publican los máximos, pero llegar a ellos debe ser porque queda totalmente justificado y si no, para eso está la justicia. Aquí la cuestión no es valorar las sanciones a determinados delitos o faltas… sino la aparente defensa que se pueda hacer de la comisión de dichos delitos, que parece que en este país es gratis. Me hace gracia cuando se habla de obstaculizar un desahucio de forma pacífica… señores, seamos realistas, eso no existe… la policía tiene que aguantar insultos, escupitajos, empujones y golpes…
En este país hay derecho a huelga, a manifestación… pero con unas reglas, si se incumplen se debe pagar por ello, no como hasta ahora, que todos salían de rositas.
Estoy hasta las narices de la corrupción, de los partidos y de los políticos en general… pero convocatorias como las manifestaciones de «rodea el congreso» también me avergonzaban.
Si queremos ser un país civilizado, debemos comportarnos como personas civilizadas, y cumplir las normas… y entonces podremos ser exigentes con aquellos que no las cumplan, como los políticos.
Yo no tengo ningún miedo a esta ley, porque estoy seguro que en mi forma de ser no concibo comportamientos que presenten el menor riesgo de ser sancionados por la misma. Entiendo que otros colectivos piensen distinto… porque en su naturaleza se encuentra el violentar las leyes y normas que nos hemos dado.
Salud!.
Creo caballero que olvida usted que en una persona civilizada debe ponderar muy alto tambien el deber de evitar leyes o normas que puedan ser utilizadas en contra de los derechos civiles y la libertad de las personas de forma no muy justificada si el que la aplica tiene mala intención. Y con el carrerón de «calidad» de nuestros gobernantes que nos gastamos en nuestra historia reciente y no tan reciente cómo para fiarse estamos.
Discrepo totalmente. Yo no me veo participando en esas acciones que se han ejemplificado en el artículo tampoco, no va con mi conducta habitual, pero entiendo que esta legislación puede utilizarse para vulnerar derechos legítimos y eso no lo tolero.
Ceder en libertad a cambio de seguridad es otra falacia de este estilo utilizada como engañabobos para controlar pueblos de borregos cuando los gobernantes (o una parte de ellos) quieran por algún oculto o evidente interés.
Yo siempre estaré en contra de los límites tan descarados igual que estoy en contra de vivir por un salario renunciando a la opción de hacerte rico con una actividad profesional libre, aunque no lo consiga nunca.
Desgraciadamente en la España de hoy en día cualquier
comportamiento de desobediencia ciudadana civil al estilo de Mandela, Rosa Parks, Martin Luther King o Mahatma Gandhi por poner algunos ejemplos relevantes, altera profunda e
intolerablemente el confort y los derechos supuestamente inalienables de la
gente de orden, que con férrea mano y seco corazón sigue dirigiendo los
destinos de este país como si el glorioso caudillo genocida no hubiera
fallecido hace ya casi cuatro décadas. http://diario-de-un-ateo.blogspot.com.es/2014/07/todo-critico-de-este-corrompido-sistema.html
Se puede decir más alto pero no más claro.
Ejemplo: piloto suicida contra realidad que jamás se dará a conocer como la de los vuelos de Malasyan Airlines que curiosamente tambien desaparecieron en zonas de «juegos de guerra» o de guerra inocultable …