La firma constructora española tiene que salir de los soportes que está tocando en las próximas sesiones, no hacerlo podría tener un severo castigo, el sector no está nada fino y pueden haber pérdidas de niveles importantes por la desconfianza que están generando algunas empresas.
Cualquier precio entre 3 y 3.6 lo consideramos peligroso y lo decimos alto y claro o sube o le pueden pegar duro porque su actual zona es de asidero, de última oportunidad casi.-