Desde hace miles de años se sostiene férreamente una forma de estructura social sólida, inamovible e inmutable, independientemente de los modelos políticos o económicos… esa «estructura social» permite mantener los mismos problemas irresolubles y las mismas crisis endémicas que se repiten cíclicamente y de la que parece que no aprendemos, sencillamente, porque la disposición piramidal del modelo, lo hace demasiado robusto y solido en contra de los intereses para la evolución de la humanidad.