80 niños, por decir un número, fueron sometidos a todo tipo de vejaciones sexuales a manos de unas personas que plañían por la rectitud de cara a la galería mientras pisoteaban toda cordura de puertas para adentro. Ocurría en Castellón a mediados de los 90 y a juzgar por la información de la que disponemos, parece ser que la trama pedófila, que tenía nombres y apellidos de sobra conocidos en la esfera política, campaba a sus anchas por Benicarló. Un secreto a voces que contaba con la aprobación de algunas de las personalidades más relevantes de la época, bien porque se divertían desflorando la inocencia de aquellos niños, o bien porque obtenían beneficios y favores al hacer la vista gorda.
Reinaldo Colás Navarro, uno de los padres de aquellos niños a los que la degeneración puso la mano encima, denunció los hechos hace 20 años junto a una de las pruebas más importantes que se tienen al respecto, que es la declaración de Joaquín Manuel Crespo Marqués, testigo principal de los hechos, además de varias decenas de denuncias de muchos de aquellos menores. Hace 20 años que ambos llevan denunciando, y hace 20 años que a nadie le interesa.
Lo único claro es que todo lo que rodea al que se conoce como el caso ‘Bar España‘ sigue siendo muy delicado, pero si el asunto les interesa tienen más información al respecto aquí y también aquí y algo más antigua aquí