Iberdrola, Endesa y Gas Natural Fenosa, amenazan con el cierre de los 7 reactores nucleares en caso de que el Gobierno no modifique sus condiciones fiscales,empezando por los «impuestos especiales» que se les aplican –y con los que se financian las renovables-.
En el Ministerio de Energía empiezan a creer que no se trata de un farol y aseguran que no es posible para España prescindir de momento de la energía nuclear, que es más del 20% de la producción, al tiempo que indica que, si se reducen los impuestos especiales de la energía nuclear -empezando por la famosa tasa del 7% que impuso la Reforma Soria- no habría fondos para pagar primas a las renovables –recordemos que la energía eólica y la solar se les sigue subvencionando con 7.000 millones de euros anuales y «supuestamente» tenemos un déficit histórico con las empresas energéticas pendiente de más de 23.000 millones–
Con todo el Parlamento antinuclear, para continuar operando con energía nuclear las eléctricas no sólo piden que se les reduzcan los impuestos sino que no se apuren todas las exigencias de seguridad que, desde el accidente de Fukhusima en Japón se han extendido por el mundo, indicando que entre impuestos e inversiones en seguridad, la energía nuclear –que dicen ellos ser barata y ecológica– ahora mismo en España se ha convertido en una ruina.
Fuente: hispanidad