Tras el nombre «Pacto de Toledo» se esconde la comisión del Congreso de los Diputados encargada de proponer las líneas maestras de la próxima reforma de las pensiones; todos los partidos están implicados en la misma y es una de las comisiones más activas del Congreso, con numerosas comparecencias, reuniones, grupos de trabajo… De hecho, lleva desde el comienzo de la legislatura trabajando y se espera que ponga sobre la mesa algún tipo de documento en algún momento de los próximos meses, o no, porque otras fuentes apuntan a que todo podría retrasarse un par de años más.
En teoría, del Pacto de Toledo no saldrá una reforma legal definida, porque la comisión sólo plantea recomendaciones de carácter general; ya luego, si eso y tal, el Gobierno y los grupos negociarán cómo se concretará el asunto, porque lo primero que hay que tener claro es que nadie desea una reforma estructural del sistema de pensiones;, es decir, hablar de pasar a un modelo mixto similar al de Holanda o Dinamarca, o definir un sistema como el sueco de reparto pero con cuentas nacionales, son cosas que ni están en la agenda ni se plantean siquiera por la Comisión.
La cuestión base está en cómo pagar el actual sistema dado que las previsiones hablan de incrementos en el gasto a futuro que seguirá produciéndose de forma inevitable porque cada vez hay más pensionistas y los nuevos cobran una pensión media más alta que los que fallecen, así que el fondo del asunto es que hablamos de una cuestión estructural, que va más allá de crisis y recuperaciones. Un dato: desde comienzos de siglo, las prestaciones contributivas crecen al doble de ritmo que las cotizaciones.
Entre los partidos políticos españoles que forman la Comisión, la posición mayoritaria es que estamos ante un problema de ingresos, no de gastos –¿no es sorprendente que tras incontables sesiones de trabajo al respecto, hayan llegado a dicha conclusión en solo 3 años?-. En fin, no quiero ponerles mal cuerpo pero que sepan que los menores de 50 años lo tendremos muy crudo para pillar cacho del sistema actual y que el futuro viene turbio, como pueden comprender uds. mismos leyendo el articulo integro de su fuente –libremercado– pulsando aquí
Está más claro que el agua que ninguno de los políticos tiene los huev…. suficientes para ponerle el cascabel al gato. Por mucho que nos fastidie la realidad actual y la futura es muy clara. No nos vamos a volver Alemania en unos pocos años, los políticos tampoco van a cambiar su ineptitud en unos años (más bien al contrario),……conclusión, que digan lo que quieran pero estamos jodi…. y encima me da que nos harán pagar más impuestos con la excusa de las dichosas pensiones.