Ercros no lo hace mal en un mercado que no lo hace bien, para nosotros sigue consolidando y está a la espera de resultados (28 febrero) para poder tener permiso de romper la bajista y confirmar pauta de continuación alcista o volverse a su línea polar si no son buenos o bien leídos.
Pharma mar desde luego ni agua salvo que no se tenga la acción y se quiera pillar algún despunte alcista para salir corriendo con la ganancia, pero si se hace esto y no sale cuidado con las caídas libres y más si el mercado va y ayuda desplomándose. Así que nuestro consejo es claro si se entra .. «salir corriendo» tanto si se gana como si no, y los inversores que la tengan que por favor compren otra cosa a la que le vean mejor perspectiva, no promedien la acción. Hay muchas mejores cosas donde poner el dinero y no en más de lo mismo que no hace más que machacar la ilusión y expectativas de sus inversores.
El gasto económico destina al infructífero desarrollo de Noscira es equivalente al lo que Space X ha invertido para DESARROLLAR su exitoso Falcon Heavy. Por poner un ejemplo. Noscira parecía que iba a ser la la leche en vinagre, la nueva revelación contra el alzheimer y de un día para otro un breve, escueto y poco descriptivo comunicado de Zeltia (Pharmamar) le puso fin. ¿Os suena de algo? Es lo que está pasando una y otra vez en esta compañía que parece maldita o mejor dicho muy mal gestionada.
Sousa (su CEO) es capaz de enterrar cientos de millones en proyectos que no han llevado a ninguna parte y sin pestañear. Con mucha opacidad, poniendo cara de sorpresa ante cada uno de los numerosos reveses. Los HECHOS son que todos los beneficios generados en Pharmamar se han diluído a proyectos estériles, que no han dado ningún resultado. Esto sería "normal" en una startup con 5 o 10 años de trayectoria, pero Pharmamar ya tendría que estar bien consolidada y repartiendo jugosos dividendos.
Todos estos desastres han ocurrido con la cara impasible de Sousa, sin cambiar su expresión de sorpresa. Sin aclarar muy bien el porqué de estas situaciones que tanto atormentan a sus cautivos inversores. Muy poca transparencia, algunos inversores suizos ya aludieron la "falta de trasnparencia" como razón para no invertir en esta "prometedora" empresa. El dinero desaparece en proyectos muy ilusionantes que se esfuman entre los dedos. Ya son muchos los juguetes rotos los de Sousa, son demasiados.
Las promesas de Sousa y las expectativas creadas no tienen nada que ver con la cruda realidad. El maltrato al accionista es descomunal. Ya no es que se le de le lado, se le informe con un cutre-pamfleto gestionado por un trabajador (pharma-jonpi). El nivel de comunicación es que al accionista se le maltrata psicológicamente. Los foros se parecen más a los damnificados de Popular o Afinsa que a una ilusionante empresa puntera. Solo hablan bien algunos centimeros que entraron a corto.
Sousa habla de las maravillas de sus medicamentos y en un pestañear desaparecen esas expectativas con un triste y escueto comunicado. Los accionistas estamos no solo defraudados, estamos muy preocupados por la gestión de Pharmamar y su reiterada opacidad ante acontecimientos tan importantes. Se necesita información detallada de las causas de perder cientos de millones en investigación. Un párrafo no es suficiente, es patético.
Da la sensación que quiere llevar a la empresa al suicidio económico, como una especie de slogan bolivariano… “victoria o muerte”. Yo pensaba que invertía en una empresa puntera, realista y que sacaba productos fantásticos. Pero el tiempo ha puesto a Pharmamar y su presidente Sousa de rodillas, ahora esta empresa vale 20 veces menos que hace 20 años (y sin tener en cuenta la inflación).
Ahora deprisa y corriendo saca acuerdos de 5 millones, que solo servirán para pagar un par de años el sueldo del presidente. Quieren dar apariencia de realizar acuerdos, en un intendo de revertir la situación. El mercado no es tonto y ni se ha inmutado, ya les conocen demasiado bien. Lo peor es que da la sensación de que Sousa ha dejado pasar acuerdos realmente interesantes, será por tiempo… ha tenido 20 años para alcanzar acuerdos con los grandes. Así que una de dos o los productos son una puta mierda o Sousa está agarrando tan fuerte su "tesoro" que lo está estropeando. Sousa es como Golum… ha perdido totalmente la perspectiva y está muy viejo. Daría risa la cosa si no nos saliese tan caro este Golum.
Incluso si mañana Parmamar volviese a valer 10 o 20€ por título… esta larga travesía por el desierto no ha merecido en absoluto la pena. Es muy triste depender de un gestor tan patoso (Sousa), que se cree dueño y señor de Pharmamar. Pero solo posee un pequeño porcentaje para asegurarse un sueldazo del copón (HECHOS). No transmite ninguna confianza. La realidad y los mercados le han dado la espalda a este señor con tendencias económicas algo suicidas.
Si Pharmamar solo tuviese su parte química cotizaría entre 2 o 3 euros. A lo que habría que añadir las expectativas de la parte bioquímica. Pero el desprestigio de Sousa y el futuro tan negro que transmite le resta valor a Pharmamar. Así que la credibilidad de Sousa no es que sea CERO, es que es negativa. Es un veneno y camicaze. Parece que nos lleva al abismo.
No parece realista. Y ya no vale la promesa de un “futuro prometedor”. Lo lógico es que dimita y dirija esta empresa alguien que sepa gestionarla “normal”. No pido un genio, solo alguien normal y que no cobre como un banquero. Como cualquier otra empresa del Siglo XXI. Que no nos prometa la luna sino que nos muestre realidades, hechos y cuide un poco a los accionistas. Que comunique correctamente, que no de pena y lástima verle hablar. Que modernice la empresa, que saque a todos los exministros del consejo de administración, que tenga un sueldo acorde a la capitalización y que de información completa. Que se sepa mover entre las grandes Pharmas, que sepa jugar sus cartas y recupere un poco de credibilidad a Pharmamar. Aunque tarde otros 10 o 20 años.
Sousa parece que le importan más las formas que los contenidos, lleva 20 años jugando a aparentar algo que no es. La cruda realidad se impone y el tiempo ha puesto a cada uno en su sitio.