Pues si, esta vez ha sido catalizada la subida por el incremento del precio crudo que ha puesto proa a los 80 dólares por la reciente escalada y tensión militar entre potencias que se disputan su hegemonía y control en Siria, esto ha beneficiado claramente al sector. Por lo tanto si se enfría la situación y el crudo remite lo que se debería intentar en Repsol tras el calentón es la posición corta porque ofrece una ecuación rentabilidad riesgo más interesante para vender que para comprar.