Igual que hay robots para fabricar y montar cosas, la genialidad de los de Cupertino les ha llevado a crear un robot que desempeñe lo contrario, en concreto el desmontaje de sus iPhone, reciclando éstos y recuperando parte de sus piezas, componentes y metales; Daisy –que así se llama el invento– es capaz de desmontar 200 iPhone cada hora considerando sus diferentes modelos y variantes desde el iphone original, con el objetivo de «recuperar» por cada 100.000 teléfonos desmantelados un total de 1,9 toneladas de aluminio, 770 kilos de cobalto, 710 kilos de cobre, 42 kilos de estaño, casi 1 kilo de oro y 100 gramos de paladio… ¿curioso, verdad?
Pues solo con el oro en poco tiempo amortizan el cacharro. Y súmandole resto de metales… ni te digo.
Un saludo.
Si ya es difícil hacer bien una cosa imagínate tener que hacer muchas bien. Habrá muchas pérdidas de tiempo cada vez que se cometa un error. Mucho más sencillo un simple trabajo en cadena. Esto me huele a efectos propagandísticos