El PIB es, por definición, «la suma de todos los bienes y servicios finales que produce un país o una economía, elaborados dentro del territorio nacional tanto por empresas nacionales como extranjeras, y que se registran en un periodo determinado (generalmente un año)«.
Esto es más fácil de decir que de calcular, pero los economistas pueden calcularlo y de hecho hay varias maneras de hacerlo. Si se trata de saber cuanto valen «todos los bienes y servicios» puedes contar todo lo producido para saberlo (el valor añadido de los productos)… pero lo mismo sería si cuentas todo lo que gastó en comprarlo, o si cuentas todo lo que se ganó al venderlo.
Por ese motivo los economistas hablan de tres enfoques para calcular el PIB:
- Enfoque basado en gastos.
- Enfoque basado en ingresos o de la distribución.
- Enfoque de la oferta o del valor agregado.
Los tres métodos nos llevan al mismo resultado, es decir que cualquiera de los tres caminos obtenemos el PIB total de un país.
Analicemos el enfoque basado en ingresos. El PIB es la suma de salarios brutos, rentas y beneficios a las empresas y el gasto en pensiones no hay que sumarlo aparte, ya que forma parte de la suma de salarios brutos –recordad que las pensiones se sufragan con las cotizaciones de los trabajadores-. Pero es muy interesante darse cuenta de que salarios y pensiones están dentro del primer capítulo, ya que ambas se sufragan con los salarios que las empresas pagan a las personas.
Pues bien, el pensamiento neoliberal actual nos graba a fuego la siguiente máxima:
Las pensiones son insostenibles porque cada vez hay menos cotizantes y cada vez hay más gente cobrando pensiones.
Todos lo habéis oído, muchos os lo creéis, ¿pero os habéis puesto a analizarlo desde un punto de vista macroeconómico?
Supongamos que el PIB europeo se va a mantener constante en el futuro –la mayoría de economistas así lo dice– De hecho, toda la economía europea se basa en controlar el PIB para que crezca de manera constante, y ningún economista neoliberal parte de la premisa de que el PIB vaya a bajar. Para explicarlo siempre se recurre al tercer enfoque, el del valor añadido: que gracias a la robotización, la automatización y la tecnología el valor añadido de los productos se mantendrá aunque haya menos trabajadores.
Porque esa es otra, todos los economistas neoliberales dicen que habrá menos trabajadores, y que el empleo cada vez será más precario. No hay –ni se le espera– una subida de salarios para los trabajadores, pero ¿que pasa con las pensiones? … porque el gasto en pensiones está subiendo porque cada vez hay más pensionistas, pero ojo, los neoliberales dicen que hay que contener la subida, que no es sostenible. Es el famoso factor de sostenibilidad de las pensiones, que hay que ligarlas a las cotizaciones para que nunca suba el total del gasto en pensiones, sino que bajen las pensiones individuales para que no suba el gasto total.
Repasemos: Ingresos de trabajadores + Rentas propietarios + Ingresos empresas = PIB
En conclusión, la receta neoliberal es dar por hecho que el primer elemento de la ecuación va a bajar, porque habrá menos trabajadores, porque no se espera que suban los sueldos y porque las pensiones estarán controladas para que bajen, y ¿sabeis que es lo mejor? ¡que te han convencido de que es inevitable! porque la población envejece, y porque ya no hay suficientes trabajadores para mantener a tantos pensionistas… pero cuidado, hay una cosa que los economistas no pueden negar, y es que el PIB no va a bajar. Ahora bien, si las matemáticas no engañan, si el PIB crece, y los ingresos de los trabajadores bajan, solo hay una explicación: ¡Los ingresos de las empresas y el capital suben! ¡Mira la ecuación!
En realidad, mientras el valor añadido de la producción no baje, no hay motivo para que bajen las pensiones. Simplemente las empresas tendrían que pagar más cotizaciones a los empleados. Algo perfectamente asumible porque las empresas –ayudadas por la tecnología– cada vez tienen menos empleados haciendo el mismo trabajo, generando el mismo valor añadido. Y lo dice el PIB.
Así que, la próxima vez que un economista te diga que las pensiones tienen que bajar, pregúntale como se calcula el PIB, y que significa que los ingresos de los trabajadores bajen si el PIB sigue subiendo.
Fuente y articulo completo: meneame story – https://is.gd/8F39zk
Si hubiera un sistema de capitalización particular toda la masa de dinero que se pasa al mes al estado para pagar las pensiones quedaría en manos del trabajador que podrá invertir ese dinero aumentando la riqueza general, habiendo más puestos de trabajo y generando así un circulo virtuoso.
La forma de las pensiones actual se trata de un sistema ponzi para cuyo funcionamiento es necesario un redoble constante de la población. Metemos 4 millones de inmigrantes para pagar las pensiones… y luego para pagarselas a esos 4, que metemos, 10 millones más?
El sistema de pensiones actual es ruina para todos.