El rebote era de esperar por la brutal sobreventa de corto plazo que llevaba pero si se para en la unión de mínimos del año pasado más parece del gato muerto que otra cosa. Mientras no rompa la bajista que trae de máximos el peligro es bajar a 4 euros porque el 61,8% de toda su subida precedente ya lo hizo. Hoy es el estrellado del Ibex.