A pesar de que han transcurrido más de 16 años desde la puesta en circulación del euro, los ciudadanos españoles siguen teniendo en su poder 268.047 millones de pesetas, lo que supone, a su vez, un importe de 1.611 millones de euros, según los últimos datos publicados por el Banco de España. Sin embargo, todo este dinero que todavía está almacenado en pesetas, podría dejar de ser útil para sus propietarios, dado que el plazo abierto por el banco emisor para el cambio de la moneda está llegando a su fin.
Recordemos que la moneda europea entró en vigor en España el 1 de enero de 2002 y pasó tres meses funcionando a la par con la peseta, el período fijado por el Gobierno español, para que los ciudadanos pudieran adaptarse a la nueva moneda. Del 31 de marzo al 30 de junio del mismo año, se introdujo un período de cambio de billetes y monedas antiguos en las entidades bancarias. Transcurrido este plazo, todos los ciudadanos que deseen canjear pesetas por la nueva moneda deberán dirigirse directamente al Banco de España, que actualmente se encuentra en fase de servicio.
Según la estimación del Banco de España, el 45% del total de las monedas en pesetas en circulación antes de la introducción del euro nunca serán entregadas al banco emisor, que procesa su conversión monetaria de forma legal. Esto significa que casi la mitad del dinero gastado en pesetas como pieza de coleccionista queda en manos de los españoles, en caso de que no se haya deteriorado, perdido o dejado el país en manos de turistas.
En resumen, el 31 de diciembre de 2020 es la fecha en la que finaliza oficialmente el plazo abierto por el Banco de España para admitir a trámite el cambio de pesetas a euros.
Fuente y articulo completo: elcapitalista.es