El bitcoin no fue inmune al covid y cayó con el mercado pero sostuvo su estructura alcista porque en los mínimos de marzo certificó su directriz alcista principal, luego reacción alcista vertical para hacer una vuelta en V que le permitió romper la bajista principal.
A partir de ahí solo ha hecho subir además ordenadamente y romper al alza los máximos de los rebotes precedentes cuando el bitcoin rebotó al 61,8% en junio del año y corrigió hasta la directriz principal con la ayuda del covid por el camino.
Ahora vemos al bitcoin rompiendo los máximos de junio del año pasado también y eso pone a la criptomoneda en rumbo máximos históricos. O sale una de esas ballenas que barren el mercado en un sentido u otro del precio o le van a pegar un tirón al bitcoin que volverá a poner nerviosos a los bancos centrales, reguladores de mercado y gobiernos nacionales.
Mientras no pierda la alcista que os marcamos tras la ruptura de la bajista: lagos comprados.