Le hemos echado un vistazo estructural al Oro por si teníamos que preocuparnos «a priori» o por el momento, y resulta que no, que no esté «on fire» como las bolsas y otros activos relacionado con la tecnología o nueva economía no quiere decir que sea bajista, no haya que estar o sea necesario liquidar.
Es que resulta que desde su último mínimo el año pasado ha llegado a subir un 77%, que si anualizamos desde mínimos del 2008 su rentabilidad es del 12.7%/año que entre el precio actual y el de mínimos del 200% la rentabilidad acumulada es del 165%.
Así que no tenemos que enfocar bien al Oro cuando lo estemos analizando, en el riguroso corto plazo solo faltaba pedirle que suba con las bolsas en subida libre y el dólar recuperando.
El Oro ha hecho una gran vuelta alcista a máximos del 2011 y necesita su tiempo para poder consolidar sus movimientos, es más si como algunos analistas creen y vamos a vivir unos nuevos locos años veinte pues no sería de extrañar que el Oro fuese a buscar su directriz alcista de largo plazo.
Y esto último tiene fácil solución sin tener que cerrar posiciones largas en Oro para algo están los derivados financieros o los ETFs de tipo inverso o short sobre casi todo. Pero el Oro siempre en cartera, vamos como la renta fija.