Nos referimos al de agosto del 2019 un mínimo relevante que más que romper rajó a la baja por el covid el año pasado por estas fechas.
El problema es que no le vemos gran recorrido puesto que la acción ha dado muchas señales buenas de compra, cuatro para ser exactos: rotura triangular muy cerca de suelo, superación de la EMA 200, superación de los máximos del rebote de marzo y la última la rotura de la triangulación.
Aunque si nos fijamos un poco más podríamos dar un objetivo técnico de vuelta a máximos del 2020 nos parece un brindis al sol y calentarla demasiado, en los niveles comentado de entre 7 y 7.5 creemos que tendrá una resitencia de hormigón armado.
Ojo también puede ser que cuando llegue coincida con fugas alcistas del mercado en general que ayude a seguir ascendiendo, si para el segundo trimestre se atisba que vamos a tener verano seguro y que la nubes se levantan y los pajaritos cantan pues si .. a los 8.5 euros pero por ahora seamos realistas y no optimistas.