Se sitúan como ellas en niveles de mínimos de la última corrección pero en el caso de las renovables amenazando con una vuelta bajista a niveles de febrero 2020, a la eléctricas Endesa e Iberdrola si atacan a sus dividendos desde luego es como si un submarino le lanza un misil a su línea de flotación porque les ha sentado como una bomba en su sede central que el Gobierno «intervenga» el mercado eléctrico para tratar de bajar el recibo por lo civil o por lo mercantil.
Ante esta incertidumbre claro está sus inversores pueden estar haciendo caja y no precisamente los «pezqueñines» sino también institucionales que piensan que sin dividendos (o merma de ellos) no hay empresa que les valga, porque tampoco es que las Eléctricas pierdan a ellas les pasa como a los bancos que ganar menos es un desastre.
Lo que está claro que Solaria y Siemens Gamesa por renovables que sean no están exentas de la presente crisis y cuidado si pierden mínimos precedentes y tras el vencimiento de septiembre les da a Raimundo y todo el mundo ponerse corto para el de diciembre.
Ambas tienen unas divergencias alcistas importantes en el MACD, es el único consuelo que queda ahora mismo