La compañía guipuzcoana SAPA, uno de los socios de Bain Capital para comprar ITP Aero, va a hacerse este miércoles con un 5% del accionariado de Indra para lo que desembolsará 90 millones de euros, según ha informado a la Comisión Nacional de Mercado de Valores (CNMV). Una operación de gran envergadura para la empresa de la familia Aperribay que, según las cuentas presentadas en el Registro, obtuvo un beneficio antes de impuestos (ebitda) de 13,5 millones en 2019 y de 6,7 millones en 2020. Y es que el interés de la operación va más allá de las sinergias en cuestiones de defensa que pueden desarrollar ambas compañías y encaja en la estrategia que busca que Indra entre en la operación de ITP Aero, participando en su accionariado.
SAPA se hará con ese 5% que comprará a la Corporación Financiera Alba en una operación que va a financiar con Deutsche Bank. De este modo, la empresa vasca se convierte en el cuarto accionista de Indra, mientras que Alba se queda con 3,21% de Indra del que se seguirá desprendiendo. La herramienta de inversión de la familia March tiene un representante en el consejo de Indra por el que optará ahora SAPA y que podría ser clave en la relación de mayorías.
Técnicamente las dos empresas Indra y Alba ha roto dos directrices bajistas importantes y tiene etiqueta de «mejor que mercado» habiendo superado incluso niveles precovid.