Obviamente nos referimos a la mayoría de países de la eurozona felicitando efusivamente a los países que tienen la gentileza de dejar exentos de IVA a los servicios funerarios como Dinamarca, Irlanda, Finlandia, Italia, Holanda y nuestra vecina Portugal. Es una auténtica obscenidad que se facture IVA a alguien que posiblemente haya contribuido a Hacienda toda su puñetera vida. Ni ese detalle tienen con los contribuyentes que lo dejan de ser por dejar de existir. La mayoría de países que lo aplican no tienen la excusa de «Europa así lo exige» o «Europa no nos lo permite según la legislación vigente» que aquí en España suelen usar como excusa. Ojo que morirse es una necesidad vital, por lo tanto todos tenemos que usar los servicios funerarios salvo que nos dejen tirados en la cama de un hospital para que corra con los gastos las entidades públicas.
Hemos normalizado tanto el abuso tributario que ni nos quejamos ni nada, ni los políticos de derechas ni de izquierdas ponen en sus programas electorales la derogación del IVA de los servicios funerarios.