La inflación sigue siendo un tema importante en los medios financieros debido a su impacto en las tasas de interés. Creemos que la inflación está actualmente bajo control. Los precios se han estabilizado, la economía es fuerte y los datos del IPC van por detrás de las tendencias en tiempo real. Sin embargo, los altos precios de la vivienda siguen siendo un factor importante que contribuye a la inflación.
El cálculo del IPC para los precios de la vivienda tiende a ir por detrás de los precios reales de alquiler y venta de viviendas en todo EEUU . Es por eso que el gráfico adjunto excluyen los costos de la vivienda del cálculo general del IPC. Al excluir la vivienda, el IPC no ha superado el 2% desde mayo de 2023. Esto no niega la importancia de los costos de la vivienda, pero resalta que su rezago actual puede estar distorsionando el panorama general del IPC.
Por lo tanto la FED puede estar obligando a la oferta a bajar sus precios al poner los tipos hipotecarios tan altos o mantenerlos altos por más tiempo, así que la vivienda que salga al mercado tendrá que reducir su precio si se quiere vender al demandante tener que pagar más por ella a lo largo del tiempo. Y es hasta posible que las bajadas de tipos si se produzcan pero que estas sean mucho más lentas para ir tirando del Real Estate o inmboliario a la baja, no porque se venda menos que es malo si no que se venda más barato que es bueno.
Tenemos que pensar con la cabeza de un estadounidense en materia de inflación, el IPC sin vivienda está al 1.48% así que el diferencial al real es por lo que la FED no está dispuesta a bajar tipos como quiere el mercado en particular y la economía en general porque si se bajan tipos rápidos se viene arriba la oferta inmobiliaria y la inflación se vuelve a a salir del corral.