Nos podemos subir a una silla para decirlo más alto y coger un megáfono para decirlo más alto pero ya no hacer ni un pullback a último soporte roto, la bajista de máximos y la EMA 200 y perder de nuevo mínimos con una divergencia es tener que tirar la toalla porque habría sido una OPV-FAKE por parte de Acciona.
Cierto es en su defensa que el mal no es empresarial de la entidad , es sectorial pero todo tiene un límite. Perder un 57% en menos de dos años en un canalización primero correctiva y luego bajista interminable es haberle tomado el pelo a los inversores colocándola muy por encima de su valoración real y eso que en el verano del 2022 alcanzó si climax en 43 euros revalorizándose desde su salida a bolsa un 51%.
Así pues creemos que es compra con stop ajustado en los mínimos de este año.