Conclusión clave: los índices están alcanzando nuevos máximos y el mercado en general sigue en marcha, por lo que no faltan los comportamientos alcistas desde una perspectiva de precios y amplitud. El sentimiento sigue desempeñando un papel clave en el repunte del mercado bursátil de este año.
La semana pasada, los nuevos máximos netos alcanzaron un nuevo máximo cíclico y el promedio de 200 días del S&P 500 ha subido sin parar durante más de un año. El porcentaje de los mercados del ACWI ha vuelto a la zona verde después de haber estado cerca de una ruptura a principios de este mes.
En agosto, el porcentaje de mercados con índices ACWI superiores a su promedio de 50 días alcanzó el nivel más alto de este año, y el porcentaje de mercados con índices superiores a su promedio de 200 días alcanzó el nivel más alto en más de un año. Después de una caída a principios de septiembre, ambos indicadores se han recuperado y se están acercando a los máximos de agosto.
La fortaleza de los precios y la amplitud robusta se han convertido en un tema muy publicitado en este momento. El sentimiento se pasa por alto en el papel de apoyo que sigue desempeñando. Al caer a su nivel más bajo del año hace dos semanas, el diferencial alcista-bajista de Investors Intelligence se acercó a lo que ha sido un umbral importante en la última década. Todas las ganancias netas del S&P 500 en los últimos 10 años se han producido con un diferencial alcista-bajista por encima del 20%.
El optimismo se recuperó la semana pasada y ha seguido mejorando esta semana. Con los alcistas en el 52,5% y los bajistas en el 22,9%, el diferencial ha vuelto a subir hacia el 30%. Si bien un exceso de optimismo puede poner nerviosas a algunas personas, es importante recordar que se necesitan alcistas para que haya un mercado alcista.
A pesar de los riesgos macroeconómicos, dado que el sentimiento, las tendencias y la amplitud siguen siendo influencias positivas para las acciones, es fácil ver que el peso de la evidencia sigue inclinado hacia la Oportunidad .