Lo de la semana pasada en la RV EEUU fue una exhibición de fuerza tendencial imperial, unos índices referenciales que solo los podría tumbar un hecho exógeno a los mercados, si este no se produce el 2025 pinta también de cara, lo que se ha visto tras la celebración de la victoria de Trump no ha sido una corrección ni tan siquiera pequeña, solo una tregua alcista que al primer apoyo ha respondido con una vuelta al alza buscando de nuevo máximos de los cuatro índices: DOW, SP, NASDAQ y RUSSELL.
Estamos ya en la semana que los mercados se quedan mirando hacia arriba para terminarla con Acción de Gracias y el Black Friday, luego todo tieso al alza como manda la estadística o la estacionalidad de los meses de diciembre.
Ya lo de Putin no es un cisne negro, ya ha lanzado un intercontinental sin cabeza nuclear para avisar que de él no se pueden reír así autorizando a usar armas de ataque contra Rusia y no para defender a Ucrania, ahora para que sea un cisne negro tiene que ponérsela y si eso ocurre mucho nos tememos que se rompa la baraja y coja la comunidad internacional deprisa y corriendo a Zelenski y lo siente a negociar a la fuerza con Putin lo que sea y como sea para poner fin al conflicto. Vamos lo que tuvo que hacer en el minuto 1 pero claro este conflicto le interesaba a EEUU que fuera lo más intenso posible para asfixiar económicamente a Rusia, ganando hegemonía en la zona y de camino pues vender armas al mundo porque no hay mejor escaparate de prueba que una refriega bélica.
Europa como estáis viendo por las noticias se arma hasta los dientes, se genera miedo en la población para que vean muy bien lo que se gasta en armamento porque claro no hay mejor marketing que jugar con los temores sociales a algo. Ahora nos venden una internacionalización del conflicto porque Putin puede mandar un pepino encima nuclear a cualquier país de la OTAN, Finlandia y Suecia están generando tanto terror que reparten manuales de instrucciones para saber qué hacer tras un ataque ruso.
La propaganda rusa será lo tóxica que se quiera pero la nuestra no lo es menos, nos estamos creyendo que interpretamos el papel de buenos y somos lo contrario. En vez de parar una guerra lo que estamos haciendo es armar a un país que no puede ganar nunca una guerra a Rusia. Habría sido más limpio que la OTAN se la hubiese declarado a Rusia que usar no solo el territorio sino las vidas de los ucranianos para hacerlo por intereses siempre espurios americanos. Para evitar la invasión solo había que cumplir lo pactado en Minsk II, lo demás mentiras y películas de vídeo.
Vamos a pensar en verde y que Rusia no se atreva y que Ucrania vea la necesidad de un acuerdo «ya de ya» para evitar una carnicería aún mayor, esto acabará con miles de muertos por nada, porque un político no quiso firmar un acuerdo y se escondió tras el honor y orgullo patrio para combatir a la madrastra rusa, al final se impondrá la realidad de las cosas. Europa a cambio pagará un plan Marshall al que por supuesto Trump no contribuirá. Y las cosas como son con Trump este conflicto no hubiese durado apenas nada.
(REEDITÁNDOLO POR ERROR DE AUDIO)