En contraste con el aparente pánico que destilan los inestables mercados financieros, la tormenta desatada alrededor de la deuda pública europea no ha alterado las carteras de los inversores profesionales. La distribución de ésta apenas ha variado desde comienzos de año. Si en diciembre, según la encuesta mensual de Lipper, tenían el 41,1% de su cartera en Bolsa, un 35,59% en bonos y un 20,19% en liquidez, en mayo los porcentajes eran del 40,5%, 36,58% y 19,49%, respectivamente.
Según la mayoría de los encuestados, el castigo sufrido por la Bolsa es excesivo. El 53,85% considera que la renta variable de la zona euro está sobrevendida, y sólo el 7,69% la ve sobrecomprada. También son mayoría los gestores que prevén elevar el peso de la Bolsa europea en sus carteras de inversión (un 38%).
Respecto al mercado de deuda, ningún gestor se declara sobreponderado en deuda de la zona euro, Reino Unido o EE UU, y entre el 31% y el 46% están infraponderados. En paralelo, tampoco ningún encuestado prevé reducir sus posiciones en deuda de estas áreas geográficas, y el 31% espera aumentar el peso de la deuda pública de la zona euro. La renta fija privada sigue siendo uno de los activos favoritos de los grandes inversores, y el 38% ven infravalorada la deuda privada de la zona euro.
La encuesta contrasta con el momento de mercado, caracterizado por la mayor volatilidad y los mayores niveles de tensión en los mercados financieros en más de un año. El Ibex ha registrado en mayo su peor mes desde la quiebra de Lehman, en octubre de 2008, y ya pierde en torno a una cuarta parte de su valor en lo que va de año. En todo caso, y aunque la posición media de liquidez de las carteras ha variado poco, hasta el 30% de los encuestados reconoce que los activos sin riesgo están sobreponderados dentro de su abanico de inversiones.
Las divisas, concretamente el euro, han sido otro de los puntos calientes de los mercados. El euro caído a mínimos de cuatro años, pero aun así el 46% de los gestores ve la moneda sobrevalorada, y sólo el 7,69% la considera infravalorada. Con el dólar estadounidense el consenso es todavía más amplio: el 61% considera el billete verde infravalorado y ninguno lo ve sobrevalorado. No obstante, a un plazo de 12 meses, la divisa de la que más rendimiento esperan es también el euro, con un 43% de partidarios por un 36% del dólar.
En este contexto, Lipper ha preguntado a los gestores de fondos si, como consecuencia de la incertidumbre de los mercados y de la revalorización del precio del oro, se plantean elevar su exposición a este tipo de activos refugio. La respuesta de los progesionales ha sido clara: el 92% no se plantea invertir en el metal precioso.
Paralelamente, el sector prevé que los fondos garantizados vuelvan a dominar los lanzamientos de productos los próximos meses. Es la opinón de dos terceras partes de los encuestados, mientras un 20% prevé que predominen los fondos clásicos.