Lo malo de hoy es que el sindicalismo español va a rentabilizar el descontento trágico y el dolor nacional de una España que se muere, para la Patronal será un día lúdico-festivo (ellos ya han conseguido lo que querían) y para los trabajadores un derecho a la pataleta, hoy es un día de dar la cara, un día donde tenemos que ser vistos por quien nos gestionan, si nos quedamos en casa no nos verán y nada les importará luego recortar o reducir porque si no salimos, callamos y si callamos otorgamos.
Cada uno desde nuestro sitio debemos poner el hombro para empujar más y mejor, no hace falta más que protestar y decir NO, y si los políticos no nos resuelven nuestros problemas que nos gobiernen quien tenga soluciones reales, todo no puede pasar por sesgarnos o podarnos nuestro estado del bienestar con la excusa de que no se puede mantener, si nosotros no hemos sido los culpables de esta crisis ¿por qué la vamos a pagar, por qué vamos a costear el importe integro de la factura?
Nuestros políticos tienen que cogernos miedo, deben saber que hay una tercera y una cuarta y una quinta vía, las élites de capital no están contribuyendo como el resto de la ciudadanía a resolver esta crisis, es más está contribuyendo a hacerla más grande y es tan grande ya que una clase social completa, la media, la que lo sostiene todo se caído dentro de tamaño agujero.
No podemos vender nuestra vida y la de nuestros hijos por un plato de lentejas, no podemos tirar nuestro estado del bienestar que nos ha costado sesenta años conseguir, no podemos ser precarios de por vida, no podemos aguantar con lo que nos echen, no podemos tolerar que la educación y la sanidad no sean totales y universales, no podemos quedar impávidos ante el fusilamiento de nuestros derechos sociales más elementales.
Nosotros hemos contribuido, hemos pagado, hemos cumplido con nuestra parte del contrato, el bipartidismo que se ha impuesto tras la muerte del dictador nos ha dado una de arena y toneladas de cal, hemos padecido crisis sociales de enorme envergadura, hemos concedido todo para que España se convierta en un gran país, pero si tras cada valle económico nos roban derechos y en las cimas nos roban todo lo que pueden y más, los que lo hacen mal no son ellos, somos nosotros.
España tiene hoy su generación más formada de su historia pero la tiene en el paro, de lunes a domingos al sol por el día y de botellón por la noche por su enorme frustración, a nuestra juventud la hemos engañado y estafado, a nosotros nos han hipotecado de por vida y nuestro poder adquisitivo en vez de crecer se ha destruido.
Nuestros políticos no tienen excusa, ellos no pueden decir ya ni «en todos lados pasa lo mismo que aquí» como decían antes, se han quedado con el trasero al aire, por ahí fuera están todos mejor que nosotros ,bueno menos los de siempre: Grecia y Portugal por tener la misma enfermedad congénita, mala gestión de lo público, por qué el Norte de Europa vive como vive y nosotros pagando lo mismo que ellos lo hacemos como lo hacemos.
España es hoy económica y financieramente un desastre , un barco lleno de vías de agua que no hay por donde cogerlo, paro en máximos del mundo civilizado, en recesión , endeudados y con una mala imagen internacional que espanta a todo tipo de inversores.
Hoy hay que salir a la calle todos, para que nos vean enfadados, para que nos traten como a personas y no como a números, que se den cuenta que tras cada recorte y cada ajuste hay vidas que se hunden, que hay familias que sufren, que ya está bien de tomarnos por masa o por plebe cuando diseñan medidas desde sus lujosos despachos pagados por todos nosotros.
Ellos tienen que poner el pie en tierra, ponerse el mono y no el traje chaqueta decirles bien a las claras que si ellos no saben ponemos a otros, y a otros, y a otros que estamos cansados de que siempre elijamos cara o cruz, si son la misma moneda, el mismo perro con el mismo collar, que este país no puede soportar a 445.000 políticos viviendo de las distintas administraciones públicas, que por ahí es por donde hay que empezar a ajustar y recortar.
Por ti, por los tuyos, por tu entorno, por tu Comunidad, por tu país por favor no te quedes en casa, sal y que te vean para que no otorgues ni firmes nuestra sentencia colectiva de muerte, y si los sindicatos quieren rentabilizar o canalizar nuestro descontento social, no lo permitas, con total educación apártate de ellos y de sus insignias. UGT y CCOO son parte de nuestro problema porque no han sabido ser la solución.