Más que probablemente la Huelga General del ayer no valdrá para nada ni para nadie, pero si tuvo un efecto bálsamico sobre la conciencia social de quienes participamos en ella, desde luego que hay que ajustar y recortar, claro que si, qué más remedio nos queda, pero todos tienen que saber que los culpables de todo este desastre que vivimos tienen nombres y apellidos, no están dando la cara y mucho menos la espalda para ayudar a cargar con la penitencia de unos pecados que no cometimos los españoles.
Y por supuesto, el otro gran eje o fuerza motriz del 14-N es que las cosas se pueden hacer de otra manera, que muchos millones de españoles lo vamos a pasar mal está claro que es el precio a pagar pero lo que no debe ser un precio a pagar o moneda de cambio es la salud de todos, la educación de nuestros hijos y la protección social a los más desfavorecidos.
Nuestro Gobierno tiene que olvidar su mayoría absoluta parlamentaria y sentarse con el resto de fuerzas políticas y sociales, escuchar a todos, hablar con todos, consensuar soluciones para que el Pueblo entienda que son las soluciones de todos para todos con sus pros y sus contras, atrincherse en la democracia del número y del ordeno y mando porque tengo el rodillo en la mano es favorecer a unos pocos y perjudicar a la mayoría.
Europa no nos está resolviendo nada, en los despachos de Bruselas se acumulan los asuntos sobre las mesas uno tras otro, los problemas llegan y se ponen en una cola donde todos están quietos y la cola no merma, siempre la misma y más grande y más grande, si no es por juana es por la hermana, si no es por una formalidad legal es por una disparidad de criterio, Europa se está convirtiendo en una torre de babel de la burocracia.
Al otro lado del charco lo tienen más claro, problema solución, acción reacción, que la solución o la reacción luego sean otro problema mayor no importa ya se la dara más adelante otra solución, arreglar en una década la crisis tecnológica y la subprime les está costando ahora una crisis en ciernes, el denominado fiscal cliff o acantilado fiscal, pero conocíendolos estoy seguro de que le darán también solución aunque la solución suponga una nueva crisis más adelante.
De acuerdo que no hacer nada ante los problemas como hace Europa o darle una patada hacia delante como hacen en EEUU no es lo correcto porque claro, si un problema político-económico no se se resuelve de forma eficiente, el problema lo acaba pagando la ciudadanía por activa o por pasiva, si no que se lo pregunten a toda la periferia europea.
En fin que tenemos que cambiar muchas cosas con caracter urgente no solo la ley hipotecaria que por supuesto es de las más perentorias en estos momentos, pero también es urgente una ley del empleo y la contratación, otra de la incentivación a la recuperación económica si no equilibramos la balanza social y económica del país nos vamos todos a hacer puñetas.
No se puede permitir que los empresarios estén encontrando en la crisis la solución a sus problemas de personal, a disfrutar de tiempos vergonzosos donde explotar a una persona estaba protegido por ley, la presión fiscal que sufrimos es tan brutal que nos hace inviable cualquier tipo de proyecto empresarial, el ahorro y la inversión están penalizados, el gris ambiente económico y el miedo lo frena todo, todos los recursos de capital disponibles no pueden ir a las provisiones de las entidades bancarias, si no llegan ni ayudas para salir adelante a la pequeña empresa, el autónomo y al negocio familiar y el crédito tardará en llegar años ¿quien nos va a sacar del agujero?.
No sigo para no aburrir, tenemos que empezar a obligar a nuestros gestores públicos a hacer cosas para todos no para unos cuantos, poner en funcionamiento otra vez el ciclo económico es tarea común por lo tanto todos tenemos que empujar del carro a partes iguales de lo contrario unos iran cómodamente sentados mientras los demás tiramos como asnos a palos porque ya en estos momentos no hay ni para zanahorias.