Cuando al Estado no le queda más remedio que ser el cómplice de un delito

Pues si, esta es la triste realidad mientras a un español que no paga su hipoteca o cualquiera que sea  su Deuda la Banca con permiso y complicidad de la legalidad vigente lo persigue hasta sus últimas consecuencias de desahucio o embargo de todos sus bienes e incluso la cárcel si procede, sin importar lo más mínimo el estado final en el que quede el deudor y su núcleo familiar a él dependiente, cuando un Banco no cumple con su Deuda la legalidad vigente le permite exigirle a sus acreedores una quita pues qué negocio para unos y qué ruina para otros, esto se llama abuso.

Esto no es justo, esto es un atentado contra la ciudadanía en general y contra lo inversores en particular, esto es un atentado al Estado de Derecho, si la Banca tiene problemas financieros y de solvencia y no puede pagar, devolver o cumplir muy bien, que devuelva la mayor parte del principal que «contablemente» pueda y quede deudora de la diferencia.

Es decir si por ejemplo el Banco Gallego no puede devolver más que el 50% del nominal de sus preferentistas que el otro 50% se le obligue a devolver en cuotas mensuales, como hace la Administración dar plazos de pago,  lo que no puede hacer el Banco Gallego es coger dinero del FROB (de todos los españoles) que previamente le ha dado la U.E. a través de un rescate (avalado por todos los españoles) y quedárselo para su financiación y funcionamiento, no señor, el primer dinero que reciba tiene que ser al menos en parte para sus acreedores.

No se puede tratar mejor o con más favor a un Banco que a un autónomo, que a una PYME o que al mismo contribuyente, para estos nunca hay una «quita», para estos nunca hay un «rescate», para estos nunca hay «perdón», desde Bolsacanaria elevamos a quien proceda nuestra más enérgica protesta, indignación y solidaridad con los afectados, este trato de favor y/o agravio comparativo no lo debemos permitir, lo debemos condenar como econoterrorismo de Estado.

Cómo se le va a permitir a los Bancos afectados  que gocen del beneficio de una «quita» de entre el 38% al 61% por su insolvencia e liquidez  y a  un desgraciado parado que se ha quedado sin trabajo con mujer y dos hijos se le obligue a pagar la cuota de hipoteca sopena de desahucio sin  descuento ni aplazamiento alguno. Si  no hay quita para los ciudadanos no debe haber  quita para nadie, que busquen otra solución.

Es que por esa regla de tres estamos más vendidos que Cristo, un día España se despierta con su prima de riesgo a 800 y lo que hace el Gobierno es coger nuestros depósitos y atracarnos a punta  de decreto-ley por el 10-20-20 por ciento del saldo que tengamos en una entidad bancaria.