No pagamos pocos políticos, pocos asesores, pocos cargos públicos para que ahora nos salgan comités de expertos a los que también hay que retribuir, recuerden que el equipo que gestiona el SAREB alias «bad bank» por ejemplo puede cobrar hasta 500.000 euros anuales.
El Gobierno le ha cogido el gusto a que «una serie de señores» de sobrada solvencia y prestigio profesional se encarguen de diseñar proyectos de viabilidad y reforma de los capítulos más sensibles del gobierno de la nación como el más reciente de las pensiones, es una forma de hacer el trabajo sucio sin tener coste electoral por ello.
Si el proyecto es draconiano para el ciudadano o socialmente injusto, pues el Gobierno se ampara en el comité de expertos, el Gobierno si lo ve factible a sus intereses de Partido que por supuesto va por encima del de los españoles pues lo hace decreto-ley e incluso ley orgánica, que hay que hacerlo encajar con calzador pues se añaden párrafos adicionales se empaqueta y se aprueba por mayoría absoluta.
Si sale mal con el tiempo el Gobierno presente no tendrá culpa, tuvo un problema lo consultó y lo asesoraron deficientemente, digo todo esto porque Montoro ya está pidiendo otro para la reforma fiscal y ya Bañez está valorando pedir otro para una nuevo capítulo de la reforma laboral, Soria en Energía podrá decir que las reformas energéticas tienen que debatirlas los agentes implicados con expertos que tengan una visión global de la situación y así suma y siga usted por que cada Ministro querrá lo mismo.
En fin que servidor no está en contra de los comités de expertos, si hasta me parecen bien, con lo que está en contra es que si el país va a ser gobernado por una meritocracia no podemos pagar los españoles por una democracia parlamentaria que no vamos a usar, disuelvan las cámaras del Congreso y del Senado, reduzcan al mínimo los parlamentos de las CCAA y dejen la administración local en mínima esencia, que trabaje en la función pública quien realmente haga una función publica con repercusión directa al ciudadano.
Es que teniendo más cargos públicos y asesores que el Gobierno de los EEUU y de Alemania los comités de expertos pueden ser una herramienta muy útil para ir desalojando a políticos y a los cargos que nombran estos (con sus respectivos asesores) del erario público.
Pues sí, para esto mejor tener una TECNOCRACIA en lugar de una estafa de democracia parlamentaria como tenemos desde hace años. Posiblemente nos saldrá más económico y no creo que fuese peor.