Hoy leemos lo siguiente en cierto periódico nacional:
Pregunta (al consorcio de gestión del Canal de Panamá): ¿Y cómo quedan los avances del lunes pasado gestionados por la ministra de Fomento de España, Ana Pastor?
Respuesta: Me llamó mucho la atención que luego de que la ministra habló con el presidente Ricardo Martinelli, con el consorcio y con mi persona, y se comprometió a que GUPC iba a trabajar dentro del contrato, y con pocas horas de que ella haya dejado el país, vengan con una propuesta que está fuera del contrato. Hemos explicado el contrato y nuestras limitaciones como empresa estatal, que no es privada ni puede hacer ese tipo de negocios, y ellos (el consorcio) lo único que dicen es ‘bueno, pero es que eso no es práctico’. El martes me dijeron ‘bueno, pero cambien la ley, si todo el mundo los apoya a ustedes’. Les dije que no puedo cambiar la ley, yo no voy a intentar llegar a un cambio de ley porque ellos quieren que yo negocie fuera del contrato.
Lean el articulo completo en su fuente
Leyendo el articulo en su fuente más bien parece que fué el grupo de empresas que lleva las obras quien les dijo «que cambiasen la ley» ¿no? (ideas de bombero)
La última respuesta de la entrevista no tiene desperdicio, y para mí, resume una buena parte de lo ocurrido.