El valor no es capaz de remontar el vuelo en zona tan técnicamente importante de apoyo como son los 3.5 euros, como la sorprenda una debacle de mercado la puede tirar a 2.7 euros, 61,8% de su último impulso alcista y por supuesto que ni se lo ocurra a la empresa decir que recorta dividendo porque se pega una leche como la catedral de Burgos de grande.