Para acabar, existen diversos indicadores de euforia que suelen coincidir con los máximos bursátiles históricos que también nos avisan que podríamos estar en un final de tendencia:
– Compras apalancadas en bolsa en niveles muy altos: En los máximos de bolsa de 2000 y 2007 la euforia de los inversores supuso la toma de riesgos excesivos invirtiendo en bolsa crédito. (ver gráfico). También suele ocurrir que un brusco descenso en las compras apalancadas es justo la antesala del pico de la bolsa y del cambio de tendencia. También está vez ha ocurrido con la fuerte caída de agosto. En la bolsa china, el día que el gobierno chino limitó las compras apalancadas en bolsa por el miedo a burbuja, se iniciaron los desplomes provocando el pánico.
– Riesgo de iliquidez: Quienes operamos habitualmente en el mercado nos estamos encontrando en los últimos años que esta desapareciendo la liquidez, las contrapartidas liquidas en el mercado de derivados, especialmente en el mercado de opciones en Europa y Estados Unidos y también en el de renta fija. Los diferenciales o “spreads” de compra y venta son los más elevados en muchos años, lo que es un gran sorpresa teniendo en cuenta que vivimos unos años de tranquilidad. Probablemente se debe a las regulaciones más estrictas que penalizan la tenencia de activos como cartera propia en los balances de las entidades financieras lo que repercute en la liquidez en la mayoría de activos financieros. ¿Provocó quizás esta falta de liquidez el desplome de agosto y septiembre?. Recientemente Zerohedge publicaba el siguiente tweet: Bank of America: “at a recent client dinner with CIO’s managing over $1 trillion in assets the largest complaint was “lack of liquidity”.”
– Los grandes cambios de tendencia suelen ser precedidos de un gran escandalo que mina la confianza y la creencia en un mercado alcista imparable. Normalmente suelen ser alguna quiebra de una gran entidad financiera de moda. Esta vez no ha ocurrido (aunque el Deutsche Bank parece empeñado en querer salir en los titulares) pero si en cambio en dos de los sectores de moda hasta verano, el industrial o automoción y el de biotecnología-farmacia. El caso Volkswagen ha generado mucha desconfianza no solo con la compañía alemana sino también en el sector. En el caso del sector farmacéutico-biotecnológico donde una de las estrellas del largo mercado alcista, Valeant Pharmaceutical se ha hundido en bolsa en septiembre y octubre. En ambos casos sus cotización han caído de 250 a apenas 90 en pocos meses por la falta de ética de sus directivos, lo que refleja también un exceso de euforia.
– Un ultimo indicador de euforia que suele coincidir con los máximos en los mercados son el volumen de fusiones y adquisidores. Máximos de compras de empresas y si además son acompañadas con deuda suelen ser síntomas premonitorios. Hasta mayo de 2015, los volúmenes eran altos pero no máximos, pero tras un tercer trimestre de grandes operaciones, especialmente en el sector farmacéutico y energético, en los primeros nueve meses de 2015 ya suponen unos niveles record.
En resumen en las próximas semanas-meses habrá que seguir de cerca el comportamiento interno de las bolsas por si acaban confirmando esta pauta de cambio de tendencia que convertiría a 2016 en un año bajista para el mercado bursátil.
lee todo el artículo de su fuente original