El PIB europeo sube un 0.5% pero queda por debajo de lo previsto y del anterior.
El IPC español aunque cumplió con lo previsto ha sido mucho peor que el anterior y nos deflactamos más todavía al -1.1% en el interanual.
Dos datos bastantes relevantes si le sumamos el empleo y el consumo de cómo está la eurozona en estos momentos y de por qué los precios de la RV no confirman ni tan siquiera el suelo de febrero, es que no hay por donde cogernos. La UE tiene que hacer un giro copernicano para poder salir de estos lodos, con regalar el dinero a los Bancos no basta.