En el mes de febrero de 2013, el número de autónomos afiliados a la Seguridad Social se situó, por vez primera desde marzo de 2006, por debajo de los tres millones de cotizantes tras perder 11.118 afiliados. La crisis, el descenso del consumo, la subida de impuestos y los recortes en la concesión de créditos propician que cada día se sumen a las listas del INEM 400 nuevos autónomos. Por ello, desde 2010, hay un sistema de protección por cese de actividad que permite a este colectivo cobrar el paro, durante un periodo máximo de 12 meses y por un 70% de la base reguladora, aunque con una serie de cuantías máximas, como ocurre con las prestaciones por desempleo de los trabajadores por cuenta ajena. Aun así, para poder beneficiarse de este subsidio, los autónomos deben cumplir unos requisitos adicionales que se detallan en el siguiente artículo, y hacerlo de un modo concreto y en unos plazos determinados.