El comentario de esta mañana sobre la prima de riesgo española no era baladí, había oído hablar de que se trata de colocar 10.000 millones en deuda pública y parece ser que la demanda institucional llega a los 45.000 millones, se trata de una emisión sindicada del tesoro español a diez años y a lo que está el bono a 10 años sería más o menos asegurarse una rentabilidad del 0.13% anual, desde luego que haya tanta demanda para servidor implica unos niveles de aversión al riesgo impresionantes.
Daros cuenta que la revalorización de las pensiones está fijada en el 0.25% , la rentabilidad de la emisión está ligeramente por encima de la mitad, quien tenga dinero para ahorrar y acuda a la emisión que piense en la inflación, de acuerdo que un magma de ahorradores o rentistas no deseen correr riego en la Renta Variable, pero si la fija da lo que da, el ladrillo sin duda será el beneficiado junto con los fondos de inversión conservadores.
Si por una parte el éxito de la colocación implica aversión al riesgo y pago por la seguridad de la deuda sindicada por no perder, también desde el punto de vista financiero es un acicate para continuar largos comprados en Bolsa, no creo que la masa inversora se resigne a tan poca rentabilidad en los próximos años, además, tampoco consideramos tanta bicoca el 1.35% a los diez años, lo más probable es que el bono a diez años en un par de años duplique tal rentabilidad.
Pero claro comparado con lo que da el bono a diez año alemán lo de España es un desplaye.
Por cierto, el Gobierno ha decidido dejar de pagar por las calificaciones de rating crediticio a las dueñas del sector: FITCH, MOODY Y S&P, veremos pronto represalias sin lugar a dudas, ellas no van a permitir que la decisión española sea la norma, cliente que se va castigo a la vista, es que si no ya me contáis para que sirve su negocio, mucho me temo que lo malo en España se empiece a magnificar y lo bueno a ningunear por ahí afuera, en venganza tratarán de boicotearnos o simplemente castigarnos con su indiferencia, daros cuenta que muchos fondos y gestores tienen la obligación directa o indirecta, por activa o pasiva de comprar en países avalados por los ratings de las casas arriba indicadas, si no es así, pues no se compra.