Setenta años después de inventar el AK47, Kalashnikov quiere volver a revolucionar el mundo militar con un pequeño drone autónomo desechable capaz de volar a 130km/h. trasportando hasta tres kilos de carga explosiva; el KUB-UAV es un drone kamikaze que permite a cualquier ejército operarlo a más de 60 kilómetros de distancia, y que tras localizar su objetivo, el drone caería sobre él explotando.
El concepto respecto a un dron militar actual cambia bastante pues el KUB-UAV de Kalashnikov se parece más a un drone doméstico que a uno actual de combate del ejercito de los EEUU que hemos visto en películas… sus dimensiones son también mucho más reducidas, de un metro veinte de envergadura por poco menos de un metro de longitud y algo más de quince centímetros de altura, y aunque su catálogo de recursos es muy limitado –ya que simplemente explota al alcanzar su objetivo– tiene la ventaja táctica de que es muy difícil de detectar y abatir por los sistemas de defensas antiaéreos tradicionales.
Aunque todavía no hemos llegado al nivel de avance tecnológico que a algunos militares y potencias les gustaría al respecto, no piensen que estamos muy lejos de que la ciencia consiga obtener resultados similares en miniatura como ya les comentaba hace unos meses aquí…
Fuente y articulo completo: magnet.xataka.com – https://is.gd/HcL0eP