Me temo que llegan tarde a la fiesta, aunque todo apunta a que el amigo Trump con su paranoia China pisó un avispero y ahora todos quieren ser independientes tecnológicamente, pues el mercado está controlado por China y EEUU.
La iniciativa «European Processor Initiative» imita lo ya realizado tiempo atras en el pasado por China y EEUU a través de distintos métodos con una intención clara, la de situar y mostrar el potencial de cómputo de cada país al mundo. En el caso que nos ocupa, la UE piensa lanzarse a desarrollar procesadores eficientes para supercomputadoras, centros de datos y vehículos autónomos, por lo que al menos su enfoque es mucho más global que los de las otras dos superpotencias.
23 empresas e instituciones de diversos países europeos apoyarán la iniciativa –entre ellas BMW, Fraunhofer, Infineon y otras– y ya se ha presentado el primer diseño de la arquitectura a la Comisión Europea, donde buscarán construir la infraestructura necesaria para albergar un supercomputador de alto rendimiento HPC bajo una empresa conjunta llamada EuroHPC, la cual se encargará de su desarrollo con una inversión inicial de 486 millones de euros.
Si tenemos en cuenta que la Comisión Europea anunció que invertiría alrededor de 1.000 millones de euros a través de los Estados miembros en 2020, tenemos que dicha iniciativa se lleva directamente casi la mitad de esta cantidad en exclusiva…
Poco se sabe de planes futuros de la iniciativa a excepción que plantean diseñar un procesador de propósito general, versátil y eficiente, enfocándolo a los mercados ya citados de computación de alto rendimiento, centros de datos, servidores y vehículos autónomos.