El movimiento técnico comentado en el artículo anterior viene motivado porque el secretario del tesoro de los EEUU ha comentado que el cierre de un acuerdo comercial está cerrado al 90% y lo que deja para Osaka es el 10% restante, esto si que no esperaba el sector gris y profesionales en la materia eran muy negativos en cuanto a un acuerdo en el riguroso corto plazo.
Nosotros creemos lo que creemos que a Trump le han tenido que decir que en una Guerra Comercial con China los que pierden son las grandes empresas y los consumidores estadounidenses y lo que es peor permitiría a otras potencias del mundo entrar al apetitoso mercado chino tanto desde el punto vista del consumo de la masa como de su élite y empresas, permitir que Europa penetre en tal mercado tendría un efecto devastador a medio plazo para EEUU se iría quedada cada vez más fuera del principal mercado del mundo.
Para que parezca que parezca que ha ganado Trump lo más probable es que China acepte su política arancelaria con la condición que la congele y la vuelva a usar como arma arrojadiza cada vez que se enoja, por lo tanto ahora se espera que haya acuerdo pese a que no hayan cambios sustanciales o directamente no los haya en materia fiscal. Daros cuenta que Trump ya está en campaña electoral que parezca lo contrario que su administración haya echado cuentas y estas les salen negativas en una guerra con China no quedaría bien en un debate televisivo.