Las formas de Johnson no gustan a todos los partidiarios del brexit

Las formas de Johnson no gustan a todos los partidiarios del brexit

El premier británico se cree que con darse un aire churchiliano mezclado con el despotismo de Trumpiniano sacará al Reino Unido de la garras de la Unión Europea como si fuésemos el resto quienes los hubiésemos engañado y fueron ellos quienes pidieron entrar y De Gaulle que nunca se fió los mantuvo fuera muchos años, al final entraron con sus condiciones sobre los demás y se van a ir como entraron con sus condiciones también.

El brexit tiene lugar porque no se puso una mayoría cualificada  como condición para llevarlo a cabo si para una decisión de tal trascendencia política con la mitad+1 vale la fractura y factura social será inevitable tanto si hubiese ganado el NO como el SI ganador, ahora tenemos a un sistema político  británico que no sabe qué hacer con el marrón de una promesa electoralera y populista, si brexit a las malas o negociado , si prorroga , si elecciones, si otro referéndum, si otras capitulaciones totalmente diferentes a las actuales.

Ayer vimos en directo y luego ardieron las redes sociales por ello como un miembro de los tories cambiaba de bando a la par que Johnson bramaba cual general espartano o senador  romano y luego remitió esta carta al primer ministro:

TRADUCCIÓN AUTOMÁTICA DESDE LA WEB DEL POLÍTICO

Después de pensarlo mucho, he llegado a la conclusión de que no es posible servir a los intereses de mis electores y países como miembro conservador del Parlamento.

Hace más de 27 años me uní al Partido Conservador y Unionista dirigido por Sir John Major. Desde 2010 he tenido el privilegio de representar a la circunscripción de Bracknell. La fiesta a la que me uní en 1992 no es la fiesta a la que me voy hoy.

Este gobierno conservador está persiguiendo agresivamente un Brexit dañino de maneras sin principios. Está poniendo en peligro vidas y medios de vida innecesariamente y está poniendo en peligro la integridad del Reino Unido. Más ampliamente, está minando la economía, la democracia y el papel de nuestro país en el mundo. Está utilizando manipulación política, intimidación y mentiras. Y está haciendo estas cosas de una manera deliberada y considerada. Ha ido mucho más allá de la imprudencia como para dejar de ser conservador.

Estoy consternado por lo que se ha convertido el Partido Conservador, el papel que ha desempeñado en la división de alimentación y el populismo, en el despilfarro de una reputación ganada con esfuerzo por una buena administración y la dirección parpadeante en la que ha puesto a nuestro país. Esos no son mis valores. No toleraré implícitamente estas cosas al ser parte de ellas.

No se equivoquen: este es un momento de ajuste de cuentas. Los desafíos que enfrentan nuestro mundo y nuestro país son reales, pero no insuperables. Necesitamos enraizar cómo los abordamos en evidencia y realidad. Críticamente, debemos reconocer que no resolveremos el cambio climático, combatiremos el extremismo ni abordaremos nuestras necesidades de vivienda, salud y asistencia social por sí solas. Debemos trabajar con otros.

Las oportunidades para dejar un mejor legado también son significativas. Como país unido, necesitamos movilizar toda nuestra innovación, creatividad, poder y talento, no enterrarlo bajo un Brexit que no cuenta con el consentimiento informado del pueblo británico. Como sociedad, necesitamos redescubrir las tradiciones liberales y democráticas que hicieron grande a nuestro país. Deberíamos guiarnos por los valores de justicia, libertad y comunidad. Debemos reconocer nuestras responsabilidades con nuestra gente y nuestro planeta: somos administradores de los recursos limitados de nuestro país y de nuestro mundo.

Cada generación necesita definir la democracia por sí misma y, por lo tanto, cada uno participa en la configuración de lo que queremos que represente nuestra política y nuestro país. Cada uno de nosotros debe estar de pie y ser contado.

Es por eso que hoy me uno a Jo Swinson y los Demócratas Liberales. Creo que los demócratas liberales están en mejores condiciones para construir la fuerza política unificadora e inspiradora necesaria para sanar nuestras divisiones, liberar nuestros talentos, equiparnos para aprovechar las oportunidades y superar los desafíos que enfrentamos como sociedad, y dejar nuestro país y nuestro mundo. en un lugar mejor para las próximas generaciones.

Mucho nos tememos que sean las terceras elecciones en cuatro años, parece que la ingobernabilidad está de moda en la vieja Europa.

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