No hay que arrastrar a la masa a grandes revoluciones y ponerse a la cabeza de ella para luego a la hora de gobernar todos sepan quien tiene que hacerlo, solo es cuestión aplicar el sentido común desde las bases mismas de la sociedad; la educación, no habrá un estado social y de derecho integral si no nos enseñan desde la más tierna infancia a impedir que nos explotemos los unos a los otros, que todos formamos parte de un todo y que somos la tripulación del mismo barco.