Todo un imperio de la alimentación han construido la familia Roig , con Juan a la cabeza y sobre todo por saber hacerse y mantener a un grupo humano vinculado e identificado con la empresa a través de una política retributiva justa y sobre estable. No es momento para comentar sus sombras (porque claro todo imperio siempre tiene una zona negra que hoy no toca ni ver ni remover) solo felicitar a la empresa por su singladura mercantil exitosa entre 1977 y 2019 en un mercado complicado controlado y acaparado por grandes cadenas internacionales y marcas multinacionales. Por último desearles que sigan así una década más para que hagan las bodas de oro con el mercado.
Fuente de la información: MERCADONA