La TV privada no implica que tenga que servir a los intereses de la clase política, la corrupción se constata en todos los partidos por activa o por pasiva, de hecho u omisión, civil, mercantil o penal, ocultarla o sesgarla también es una forma de corrupción de los medios de comunicación tanto pública, como privada como institucional.
Listas abiertas ¡YA!!!