En todo el planeta se vio ayer jueves todo lo sucedido el miércoles en el asalto al Capitolio, capilla Sixtina creíamos todos de las democracias occidentales porque al menos de puertas para adentro la democracia estadounidense es modelo o molde para todos los demás países, eso si ya sabemos todos que desde que salen de sus fronteras los estadounidenses y más sin son tropas se pasan la democracia del resto del mundo por el arco del triunfo.
Un Donald Trump absolutamente desquiciado con su ego pisoteado y su presidencia para él robada a manos de una conspiración demócrata hizo lo peor que se esperaba y fue lanzar a sus incondicionales contra las sacrosantas instituciones de los EEUU, cual general de los antiguos ejércitos imperiales antes de la batalla arengó a su gente, no a los republicanos, eso sería faltarles al respeto a la mitad de los votantes sino a los «trumpistas», la mayoría como vimos por TV personas con alguna tara mental que creyeron en que era la hora de una épica insurrección.
Dantesco y bochornoso espectáculo el ofrecido por cientos o miles de fans de Trump que rodearon el Capitolio hasta que un grupo de esta horda se atrevió a entrar y tomar la institución cual palacio medieval por la plebe harta de los abusos de su señor feudal o rey absolutista. Fue como una toma de la Bastilla pero de mentirijillas.
Trump quedó en el más espantoso de los ridículos mediáticos, su propia gente le desertaba cuando apenas le quedan días para dejar la Casa Blanca, hasta Mike Pence un ultraconservador igual que él al menos se desmarcó de la fantochada que estaba viendo y viviendo los políticos que allí estaban para dar designación al nuevo Presidente de los EEUU a la sazón Joe Biden. Este salió después a machacar mediáticamente a Trump a pisotearlo y exhibirlo como un fascista megalomaníaco.
Si a Trump le quedaba un resto de razón o verdad en toda su argumentación desde que perdió las elecciones desde luego la perdió toda el miércoles y aún así, no ha condenado lo sucedido, ha agradecido los servicios prestados a sus acólitos , los ha mandado a casa y lo más digno que comentó fue que iba a facilitar el cambio de gobierno, ya solo faltaba entonces que se quedara de okupa en la Casa Blanca.
Ahora bien Pelosi va a por Trump y no lo va a dejar irse impune por lo que ha hecho u omitido hacer: o aplicación de la 25 enmienda o impeachment por la vía express porque lo considera un peligro y no puede seguir siendo el comandante en jefe de los EEUU.
Mucho creo no equivocarme si alguien llamó a la SEC y al NYSE para que aseguraran un buen comportamiento bursátil mientas tenían lugar tales tremendos hechos en Washington que a los españoles nos recordó a nuestro 23-F pero en vez de guardia civiles con gente disfrazada de los Village People, porque caramba con el elenco insurrecto, las imágenes hablan por si solas de lo mal que está psicológicamente alguna parte social de los EEUU que igual es mucha más de lo que muchos pensaban.
En fin que mantengo que por línea interna se llamó a los organismos rectores de mercado para que estos a su vez contactaran con los grandes firmas de inversión y capital riesgo para cortar cualquier efecto financiero de raíz. Y fue hasta incongruente ver como asediaban el capitolio en Wall Street mientras los tableros electrónicos subían haciendo máximos históricos tanto el mismo miércoles como ayer jueves.
Como comenté ayer la euforia bursátil mantiene a Wall Street en una burbuja aisla a sus bolsas del mundo ya pueden llover bombas, haber una guerra que la orden es comprar y si corrige también comprar. Hoy la sesión empieza a las 14.30 horas españolas cuando se conozca la tasa de desempleo USA que se espera sea de un 6,8% desde el 6,7% anterior que para la que cae es un dato fantástico e incluso sean décimas por encima.