Los últimos números del paro en España son difícilmente creíbles cuando la base de datos del SEPE está K.O. que no se pueden pedir prestaciones ni computa nuevos parados por fallos técnicos, eso si, como salieron 60.000 menos Yolanda Díaz rápidamente lo comunicó a redes sociales para pagar favores debidos que no tiene un pase.
Si el número de parados es demencial y se le suman los que están «ertados» y los que serán «erados» o incluso despedidos España se convertirá en una zona laboralmente catastrófica y socialmente dependiente de ayudas públicas con mucha gente en las colas del hambre para poder extender sus subsidios al máximo.
Pero claro si las personas tienen problemas en estos tiempos imaginaros las empresas, es noticia que el número de entidades mercantiles «zombi» supera cualquier sostenibilidad económica de un país y merma su imagen exterior enormemente, nos ha gustado esta definición de empresa zombi para saber de qué estamos hablando:
La definición de empresa zombi o vulnerable, como también se le llama, puede variar según el organismo, pero se podría resumir en que son aquellas empresas que sus beneficios no son capaces de cubrir sus costes financieros, o sea, que lo que ganan no les da ni para cubrir los intereses de sus deudas. No que no puedan devolver sus préstamos, sino que apenas les llega para cubrir los intereses de esas deudas. Este ratio indica que dichas empresas sobreviven gracias a continuas refinanciaciones de sus deudas. Un dato muy alarmante, sobre todo teniendo en cuenta que, en la actualidad, los tipos de interés en más de medio planeta, pero sobre todo en Europa, se encuentran en mínimos históricos y con ellos el pago de intereses de esas deudas.
En la actualidad (2020) , según el INE, en el Estado español existen unas 3.360.000 empresas. Por lo que el 8% que calcula el BdE, el mismo organismo que no vio venir la quiebra de varias cajas de ahorro, supondría que existen 268.800 empresas zombi que, en caso de que suban los tipos de interés o reduzcan su beneficio podrían quebrar.
Pero cuidado este extracto corresponde a un artículo de la fuente «antes del impacto del covid en la economía, tanto nacional como internacional. Reitero «antes» fecha 6 de febrero 2020 pero aquí ha pasado lo que ha pasado
Mirad que dato terrorifico de Iberinform:
De acuerdo con el análisis de Iberinform, la recesión generada por la pandemia provocará que cerca del 17,6% del tejido empresarial español pueda considerarse zombi al cierre de 2020.
Y a los más liberalistas de vosotros o los que entendéis que el mercado es soberano y aplica su propia selección natural donde sobreviven los más fuertes o mejor se adaptan les damos la razón, y la que no pueda seguir que quiebre pero claro una cosa es la realidad económica y otra la realidad social, todas esas empresas que van a quebrar arrojarán personal para consumir un erario público inexistente dado el endeudamiento español.
Esto nos condena a una rescate financiero obligatorio y con él llegaría la troica y nos van a podar el ya escaso estado de bienestar que nos resta, con seguro recorte en pensiones , gasto público y coberturas sociales.
Algunos pensaréis pero las ayudas que vamos a recibir servirán para levantar el país, pues me temo que estáis en un error si parte de las ayudas públicas se destinan o son fagocitadas por empresas zombies, si antes de la crisis del coronavirus ya habían las que habían ahora pues eso sumen las que van cayendo una tras otra durante todo este tiempo la variación por CCAA. sería más o menos la que sigue:
Si las empresas no zombies necesitan ayuda económica pública para financiar su pasivo de todos estos meses y las zombies que antes del covid ya estaban mal pues ahora van a estar peor, la pregunta es una ¿qué parte del dinero que va a recibir el tejido empresarial español se va a dedicar al crecimiento, el desarrollo y la innovación si han acumulado deudas por todas partes?
El gobierno español tendrá que hacer cuentas de cuanto se incrementará las prestaciones sociales por desempleo y desamparo para evitar entregar dinero a empresas que ya eran inviables y/o en estos últimos meses se han inviabilizado por no poder soportar el daño de la crisis. Lo que no puede es ponernos a reformar y apuntar con dinero público casas en estado de ruina e inhabitables. Se tendrán que dar ayudas a aquellas empresas que se comprometan a su vez a recoger trabajadores de otras, ese debería ser el requisito número uno.
Si se reparte dinero los euros tienen que ser para aquellas que pongan un proyecto de contratación de recursos humanos y materiales por delante, con unos balances en rojo, con débitos a todo tipo de entidades públicas y proveedores lamentablemente solo podrán recibir dinero si mantienen al personal y no lo cogen para echárselo al bolsillo para luego quebrar por inviabilidad y los trabajadores al Fogasa.
Desde luego con el Gobierno que tenemos malo y largo nos lo fían no vamos a recuperar en unos cuantos años la situación previa a covid que tampoco era tan maravillosa oiga. El FMI dice que el PIB lo recuperaremos en 2023 (solo faltaria con lo bajo que lo tenemos, es como una empresa que cae el 50% y le dan un objetivo de un 10% más arriba) ¿cómo nos lo iban a bajar?.
Y atención porque el FMI dice que el empleo antes de covid para el 2027, directamente con estas proyecciones se deberían convocar elecciones generales con la obligación de que cada partido aspirante presentara un pliego del conjunto de medidas a aplicar visado por una colegiatura de expertos multidisciplinares para que no nos vendan ni motos ni humos.
Ya es hora de dar el voto por un contrato socio-económico validado por un espectro intelectual de sobrado prestigio y probada independencia con respecto a lo político. Aquí ya hay mucho sinvergüenza parasitando al erario público y tenemos que hacer adelgazar a la administración pública y empezar también a liquidar instituciones inoperantes ni vinculantes que solo sirven de retiro a sus señorías y altos cargos del estado que viven como marqueses por asistir a firmar lo que funcionarios le ponen delante.