No es lo mismo hacer techo que estallar una burbuja

En la última etapa del mercado alcista que culminó en 1929, el público adquirió una actitud completamente diferente hacia los méritos de inversión de las acciones ordinarias. ¿Por qué el público inversor desvió su atención de los dividendos, de los valores de los activos y de las ganancias promedio, para transferirla casi exclusivamente a la tendencia de las ganancias , es decir, a los cambios en las ganancias esperadas en el futuro? La respuesta fue, primero, que los registros del pasado estaban demostrando ser una guía poco confiable para la inversión; y, en segundo lugar, que las recompensas ofrecidas por el futuro se habían vuelto irresistiblemente seductoras.
 – Benjamin Graham y David L. Dodd, Análisis de seguridad, 1934

¿Qué está pasando ahora mismo? pues que las ganancias de las empresas del SP500 están en sintonía con el precio o por pasiva el precio es el reflejo en un espejo de la evolución mercantil de las empresas que cotizan en el índice.

¿Estamos en una burbuja? no

¿Podemos estar fraguando un techo de mercado? si

LLegará el trimestre en que las proyecciones de resultados no va a ir a más o para cada vez menos y eso hará que la aversión al riesgo suba con unos precios en cumbre, si la expectativa de ganancia baja el inversor no va a permanecer en el mercado, derivará su inversión o a la liquidez o a productos de escaso riesgo hasta que el ciclo corrija  y vuelva a remontar atrayendo de nuevo la inversión en renta variable.

Es decir haremos un techo y una corrección estructural, lo de más o menos dolorosa será según la capacidad de gestión de cada cual, habrá quien se quede sin hacer nada de nada, quien lo cierre todo y hasta el próximo suelo estadístico del mercado, quien además  se ponga corto, quien mantenga sus posiciones y haga coberturas de las mismas para que la corrección no le haga daño o el menos posible, Hay distintas fórmulas para soportar una corrección estructural del mercado.

Ahora que la prensa salmón le quiera llamar crash, fin de la burbuja, colapso financiero, pues ya eso es cuestión de la imaginación del autor el artículo en cuestión, todos sabemos que los titulares terribles , funestos , luctuosos, emocionales fuerzan al lector y se introducen rápidamente en su psique y lo que es una corrección de ciclo sea vista como el fin del capitalismo y de sus mercados financieros.

Veamos:

Lo que está pasando es simple. Durante los últimos 12 meses, el gobierno federal de los Estados Unidos ha tenido el déficit fiscal más profundo desde la Segunda Guerra Mundial. Los inversores parecen estar subestimando enormemente la medida en que un probable repunte económico reemplazará, en lugar de aumentar, el efecto de billones de dólares en programas de ayuda pandémica, que ascienden a cerca del 20% del PIB, lo que preservó los ingresos corporativos al tiempo que subsidiaba los costos laborales

Lo que está pasando es simple. Durante los últimos 12 meses, el gobierno federal de los Estados Unidos ha tenido el déficit fiscal más profundo desde la Segunda Guerra Mundial. Los inversores parecen estar subestimando enormemente la medida en que un probable repunte económico reemplazará, en lugar de aumentar, el efecto de billones de dólares en programas de ayuda pandémica, que ascienden a cerca del 20% del PIB, lo que preservó los ingresos corporativos al tiempo que subsidiaba los costos laborales

El gráfico a continuación es un recordatorio útil de la aritmética desafiante que enfrentan los inversores en los extremos de valoración actuales. Supongamos que en los próximos 5 años, los ingresos del S&P 500 crecen a la misma tasa anual del 4% que en las dos décadas previas a los máximos previos a la pandemia. Suponga que durante ese período de 5 años, la relación precio / ingresos del S&P 500 se retira de su múltiplo actual de 3,1 a un nivel no inferior al extremo de la burbuja de 2000 de 2,2. Dado un rendimiento por dividendo de solo 1.4% en el S&P 500, resultaría el siguiente rendimiento total anual promedio:

1.04 * (2.2 / 3.1) ^ (1/5) -1 + .014 = -1.5% anual.

Eso es asumiendo que las valoraciones ni siquiera rompen por debajo de su pico de burbuja de 2000. Ciertamente, es posible hacer diferentes suposiciones, siempre que sean razonables y estén basadas en evidencia histórica. Lo que no es posible es alterar la aritmética básica que vincula las valoraciones, los fundamentos y los retornos de inversión posteriores.

De hecho, la misma aritmética implica que, siempre que las valoraciones disfruten de una “meseta permanentemente alta” en los extremos actuales, los inversores podrían esperar razonablemente rendimientos totales anuales promedio de alrededor del 5,4% en el futuro. Sin embargo, esa cifra requiere que las valoraciones se mantengan en máximos históricos por tiempo indefinido.

Nunca es bueno cuando se compran pollos sobrevalorados y contados dos veces con dinero prestado. Con la deuda de margen en el nivel más alto de la historia en relación con el PIB, con las valoraciones más extremas registradas, con un sentimiento alcista en extremos desequilibrados, con el S&P 500 empujando sus bandas superiores de Bollinger en cada resolución, con divergencia y deterioro en nuestras medidas de mercado. internas, y con el S&P 500 sorprendentemente sobreextendido en relación con los promedios móviles ampliamente seguidos (por ejemplo, 200 días), creo que el mercado está en claro riesgo de un «pánico» vertical o una «bolsa de aire» muy similar a lo que observamos en 1987 y 1998. Ninguno de esos pánicos estuvo asociado con una recesión.

Una disminución del 20-35% encajaría fácilmente en ese tipo de resultado. Eso no haría que las valoraciones se acercaran a sus normas históricas, pero realmente no hay necesidad de hacer proyecciones o depender de un escenario determinado. En la actualidad, tenemos una combinación de valoraciones extremas, factores internos desfavorables del mercado y presiones al alza de los rendimientos, que nunca hemos visto de manera favorable, porque puede crear una situación de “trampilla”.

Es decir tenemos que parar o saber decir alto, hasta aquí llegué yo, no se puede entrar a estos precios , en activos sobrevalorados en particular y con mercados y sectores en techo en general y ya si es con derivados para darnos de collejas, no podemos exigir a las empresas que mantengan esta velocidad crucero en sus resultados empresariales y necesitar forzosamente que los próximos sean mejores que los anteriores trimestre tras trimestre, no, eso no va a pasar porque aparte de no poder ser es que es imposible.

Y cuando los mercados  corrijan que para ellos un entre un 30% o 40% es apenas nada no los  culpemos de que nos metieron dentro de una burbuja ni otros cuentos de viejas de los mercados financieros, simplemente fuimos víctimas de nuestra codicia.

Con este artículo no pretendemos meter miedo ni enviaros  mensajes proféticos subliminales, para nada vamos , el mercado está bien y sano, pero hay que ver el trayecto recorrido y a  atletas de Maratón no le podemos decir que nada, que hay que correr 10 kms más que la carrera esta bonita y los espectadores quieren más espectáculo durante más tiempo.

Alguien se imagina que un señor entre por la puerta de un banco con un porrón de dinero y le diga al empleado del departamento de renta variable «quiero invertir  diez millones de dólares a largo plazo» porque veo que el mercado no para de subir y yo estoy fuera como un tonto. o llevo esperando una corrección para comprar hace  muchos meses y ya no aguanto más. ¿Creéis que son argumentos para invertir en bolsa a largo plazo?, pero ojo, también os digo que no es plan tampoco lo contrario, oiga las bolsas van a caer a la fuerza dada la altura que han tomado colóqueme estos 10 millones de dólares en productos para ganar a la baja.

fuente gráficos y extractos

PUBLICIDAD (google adsense)